La causa se inició con la denuncia que impulsó una tía de las víctimas, una menor de 14 años y su hermano de 12. Relataron que el sujeto los manoseaba cuando los llevaba en su vehículo. Pudo haber acceso carnal a la adolescente.
Es de apellido Sandoval (38). Está acusado de "amenazas, lesiones y privación ilegítima de la libertad" a su ex, "lesiones leves agravadas por el vínculo" a tres niños (serían sus hijos) y "abuso" a uno de ellos.
Está acusado de abuso sexual gravemente ultrajante y además la fiscal le acumuló otros tres casos de abuso sexual simple. En el interrogatorio fue asistido por el abogado Luis René Barraza, quien le aconsejó abstenerse de declarar.
La mamá del nene lo llevó al hospital Bouquet Roldán en estado crítico, pero tuvo que ser trasladado a uno de mayor complejidad por la gravedad del cuadro.
El agresor le dijo que iba a prestarle el celular "para que jugara".
Mientras un abogado presentó una eximición de prisión para el degenerado sujeto, que sería un folclorista, aparecieron otras víctimas que se aprestan a radicar denuncia.
El sujeto de 59 años fue detenido durante un allanamiento realizado por el personal policial en su propiedad.
La mujer solía quedar al cuidado del menor cuando su hermana salía a trabajar.
El imputado está detenido y le secuestraron el celular, con el que él mismo habría filmado el ataque.
Se hizo lugar al planteo de los Dres. Fabiola Arce y Luis Serrano, quienes argumentaron inexistencia de peligros procesales, y ofrecieron un domicilio situado a casi 20 km de donde vive la víctima, para que resida el sujeto.
El fallo se dictó por mayoría de votos. Un vocal opinó que el sujeto debía ser condenado solo por abuso sexual agravado y le imponía una pena de 8 años de prisión, en tanto que lo absolvía -por la duda- de la corrupción de menores.
Requerirá aplicarle la pena de 18 años de prisión, como autor de abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual gravemente ultrajante, entre otros delitos. La defensa se opondrá, pedirá rechazar tal planteo y confirmar el fallo dictado.
El profesional se encuentra acusado de haber abusado sexualmente a dos pacientes, a las cuales habría manoseado en sus partes íntimas. Negó tales acusaciones y ahora esperará ser interrogado por la fiscal que investiga los casos.
Hicieron lugar al planteo de la defensa, que solicitó cambio de calificativa a abuso sexual simple y que sea liberado. Le impusieron una fianza personal de 2 millones de pesos y severas medidas restrictivas.
Coincidió con la defensa del inculpado, ejercida por los abogados Miguel Brandán y Martín Páez, en cuanto a la inexistencia de peligros procesales
