La víctima fatal, de apellido Ruiz, circulaba haciendo zigzag y se cruzó de carril, haciendo imposible al automovilista evitar el impacto. El informe y las identidades de los protagonistas.
La uniformada, de apellido Barraza, llegó a la casa de su expareja tras finalizar su servicio, para buscar al hijo que tenían en común, y se desencadenó la tragedia. Le pegó más de diez balazos.
El funcionario había sido hallado sentado en una reposera y ya sin vida, con un disparo de arma de fuego en la cabeza. Se trataría de un suicidio, aunque el fiscal no descarta ninguna hipótesis.
Ocurrió a la 0.20 de este sábado en calle Ushuaia al 100, en la Capital santiagueña. Se trata de un sujeto de 36 años, de apellidos Juárez Alderete.
José Alberto Sánchez habría agonizado unos minutos, tras ser atacado a tiros en el campo, donde trabajaba desde hace tiempo.
Las víctimas fatales tenían entre 8 y 16 años. No pudieron escapar de las llamas que tomaron el inmueble.
Ocurrió este miércoles a 10 kilómetros de Pinto. Personal policial y la fiscal de turno se dirigían al lugar.
Los hallazgos apuntan a la autodeterminación como causa. Daños en varias viviendas y autos en el perímetro de cuatro manzanas.
???No quedó absolutamente nada???, dijo un hijo de la víctima, y agregó: "No nos explicamos qué puede haber ocasionado una explosión de tamaña envergadura???.
Uno de los menores llegó vivo al hospital, pero nada pudieron hacer por salvarlo. El conductor del auto perdió el control e impactó frontalmente con el pesado vehículo. Esto informó la Policía.
Se desempeñó en la fuerza de seguridad hasta 2018, cuando le diagnosticaron trastorno de bipolaridad. La golpeó en el cráneo con un tubo de gas, y con dos cuchillos le seccionó la cabeza. Cenó junto al cadáver y se entregó. Esto informó la Policía.
En el rodado de menor porte circulaban dos jóvenes, de apellidos Aguilera y Lizárraga. Uno murió apenas llegó al hospital, y el otro en gravísimo estado.
Se trata de cinco hombres, que salieron despedidos del vehículo y fallecieron en el acto. Ocurrió antes de que empezara a llover.
En la investigación intervino la UFI de Lomas de Zamora, que busca pistas de la muerte de Alejandro Martínez. La autopsia reveló que la muerte del hombre fue causada por "asfixia por sofocación mecánica" y varios golpes.
