
Conmoción: hallaron muerta a una mujer desaparecida junto al cadáver de su exmarido
El hallazgo consternó a familiares, amigos y vecinos. Se sospecha de que fue un femicidio seguido de suicidio. No obstante, aún no hay conclusiones.
El hallazgo consternó a familiares, amigos y vecinos. Se sospecha de que fue un femicidio seguido de suicidio. No obstante, aún no hay conclusiones.
El asesino se esfumó luego de haber matado a su expareja, con la cual tenía 3 hijos. Tras 14 años, lo encontraron en la playa y fue llevado a juicio.
El uniformado, de apellidó López, utilizó su arma reglamentaria. La mujer, Mansilla, también era integrante de la fuerza de seguridad, con el grado de Sargento. El informe.
La víctima, de apellido Escobar, era buscada desde el pasado 22 de abril. El cadáver estaba tapado con una capa de cemento. El informe.
Cuando llegó la Policía encontró a la mujer en la calle, con cuchilladas en el cuello. Dentro de la casa, el sujeto estaba ensangrentado, con varias heridas. El informe.
El asesino abusó sexualmente de la adolescente antes de matarla a puñaladas. Los familiares reconocieron al individuo y tomaron la justicia por su propia mano.
El chico no dudó en subirse a una moto y manejar hasta la comisaría para dar aviso de lo sucedido. Gracias a él, la mujer vive.
Tras el crimen, el sujeto fue visto saliendo de la casa en una bicicleta celeste y lo buscan intensamente. El informe.
Una descendiente de la mujer, de 16 años, llegaba a la casa con dos amigas cuando encontró los tres cadáveres. Esto informó la Policía.
Tras entrar a la casa donde yacía el cuerpo sin vida de la víctima, una calificada fuente dijo que "jamás había visto una cosa así". El informe.
La joven fue hallada colgando en la habitación donde duerme su hijo. Sus familiares exigen que la causa sea tratada como femicidio.
Se trata de Fabián Adrián Centeno, quien tras ultimar a la víctima y atentar contra su propia vida, se dirigió en moto a la comisaría para dar cuenta del crimen que había cometido.
Una vecina del barrio Mama Antula llegaba de dejar sus hijos en la escuela cuando oyó las detonaciones y llamó a la Policía. Su relato.
Tras dispararle dos veces con el arma a su pareja, y creyendo que estaba muerta, se descerrajó un tiro. Era de apellido Catán, de 62 años.
Tras el crimen, el asesino intentó suicidarse prendiéndose fuego. Se entregó voluntariamente en la Comisaría 15ª. Personal policial y el fiscal de turno trabajaban en el lugar.