El padre Mario Tenti ofició ayer la misa en honor a Mama Antula, en el santuario de la beata santiagueña, ubicado en la localidad de Villa Silípica.
Peregrinación en moto
“Ha habido una gran concurrencia de motos. Calculamos alrededor de 300, entre las que han salido y las que se han ido agregando en el camino”, introdujo el padre en diálogo con Nuevo Diario, al respecto de la peregrinación en moto que antecedió a la ceremonia religiosa.
El sacerdote rescató “el tiempo, que nos ha ayudado un montón. Ha sido un día muy lindo para la peregrinación (NdeR: Santiago del Estero registró un día antes una temperatura máxima superior a los 43 ºC, según el Servicio Meteorológico Nacional)”.
Tenti notó que “toda la peregrinación ha sido de participación” con “la gente contenta” y “unida”.
“Antes de salir de la escuela, la gente estaba charlando, integrándose. Había distintos grupos tomando mates. Un clima de alegría, como el que suele rodear a este tipo de eventos”, manifestó.
Misa
Al respecto de la llegada de los devotos al santuario, dijo: “Hemos compartido un mate cocido con pan casero. La misa fue bajo un clima de mucho acogimiento. La gente acompañando con los cantos, con la oración... la verdad que estamos muy sorprendidos porque la peregrinación en moto suele tener una connotación más social que religiosa, sin embargo, había un lindo clima de fe”.
El padre destacó que la gente haya escuchado la Palabra de Dios, pero, sobre todo, le llamó la atención que, una vez finalizada la misa, había “una cola enorme para acercarse a tomar gracia de la imagen de Mama Antula”.
“Después de la misa he estado bendiciendo como media hora. Se arrimaban matrimonios, gente enferma. Peticiones para que recemos por algún hijo o pariente que estaba enfermo. Todo eso es lo que vehiculiza Mama Antula”, agregó. El sacerdote, por último, remarcó que la beata santiagueña “está despertando la fe en mucha gente”, “ha acercado a muchas personas a Dios” y a otras “les ha aumentado el fervor, la devoción y las ganas de reencontrarse con el Señor y recibir su amor y bendición”.
