La Comisión de "Nuestra Señora de la Dulce Espera" desarrolló ayer el "Vía Crucis por la Vida Naciente y la Paz" recorriendo el microcentro de la ciudad como un verdadero testimonio de vida camino a la Pascua de Resurrección.
Los fieles, entre ellas futuras mamás y madres con sus pequeños, realizaron el recorrido entre oraciones y cánticos experimentando los momentos vividos por Jesús de Nazaret.
Asimismo, destacaron la buena predisposición de los comerciantes al aceptar que su local se convierta en "estación" para orar por la paz, el bienestar de los adultos mayores, las mamás embarazadas, aquellas mujeres que rezan por la bendición de un hijo y los niños.
Al finalizar el vía crucis, y ya en el atrio de la parroquia Cristo Rey se dio lectura a la oración por la paz, donde se pide al Señor que toque el corazón de quienes provocan el sufrimiento y muerte para que les de el don de la conversión. También se pidió por la protección de las familias, los misioneros para que sean promotores de paz y justicia.