Saltar menú de navegación Teclas de acceso rápido
La Provincia #Salud

???Estas patologías se clasifican como tiempo-dependientes, es fundamental???

Nuevo Diario mantuvo diálogo con profesionales del Cepsi que atienden a los niños de Nueva Esperanza quemados con ácido.

El sábado 5 del corriente mes, dos menores de 3 y 6 años fueron trasladados en helicóptero por quemaduras con ácido. El hecho se llevó a cabo en Nueva Esperanza, departamento de Pellegrini. Los pacientes pediátricos pertenecen a la colonia Menonita de la localidad de Ahí Veremos, al norte del departamento Pellegrini y a 80 kilómetros de Nueva Esperanza.

En diálogo exclusivo el Multimedio con los doctores Luis Carrizo, coordinador de urgencia, y Juan Asselborn, residente de cirugía, se le consultó sobre cómo fue el plan de acción, el proceso de “medicina prehospitalaría”, cuál es la situación actual de los afectados y consejos/cuidados a seguir en el hogar para evitar este tipo de accidentes. 

Aproximadamente a las 9 recibieron el reporte del caso: 2 pequeños con quemaduras en el rostro y demás partes del cuerpo al explotarles una botella de soda cáustica mientras dormían en su habitación. 

Las lesiones del niño de 3 años, a parte de comprometer su cara, también complicaron sus vías aéreas (boca, nariz, faringe, laringe y tráquea).

“Este es un líquido que va quemando la piel mientras va tomando contacto con esta. Entre más tiempo pase sobre la dermis, peores son las lesiones. Es un ácido”, explicó el Dr. Asselborn, y luego el Dr. Carrizo añadió, “estas son patologías que se clasifican como ‘tiempo dependiente’. El tiempo de acción con el que uno pueda actuar es fundamental, resulta en mayor beneficio”, y luego detalló el proceso de acción. Primero uno debe tratar de neutralizar los efectos del ácido en la piel y mucosas, y por otro lado asegurar la vía aérea, lo cual significa entubar o hacer una traqueotomía (abertura en el cuello que se lleva a cabo durante un procedimiento de emergencia)  para que pueda respirar por la inflamación de la garganta en resultado al accidente”, dijo el Dr. Carrizo.

“Mientras más tiempo pasaba más se le cerraban las vías respiratorias, por lo que en 1 hora se organizó el traslado en helicóptero”, manifestó el Dr.  Asselborn.

 

 

En los hospitales de servicio de urgencia vemos a diario la ingesta de lavandina, ácido muriático, cloro y demás productos de limpieza”.

 

 

 

El coordinador de urgencias hizo referencia a que hay que destacar la estabilización, “en casos graves como este es fundamental. Estabilizar significa tratar de aproximar a los valores normales los parámetros vitales: frecuencia cardíaca, respiratoria, temperatura, saturación de oxígeno y presión arterial”. 

La niña de 6 años ya está de alta del hospital, continuando con el proceso de “controles ambulatorios”, mientras que el niño de 3 años se encuentra internado en terapia. 

“Como personal de salud debemos utilizar estas situaciones para indicar que la manipulación de cualquier sustancia que sea tóxica, debe estar fuera del alcance de los más chicos. Tratar de no colocar productos de limpieza en envases de gaseosa,  ya que los chicos muchas veces no discriminan”, declaró el Dr. Carrizo.

 

Barreras culturales y contención familiar, en la mirada de un residente del Cepsi

 

 

Al preguntar por la presencia de este ácido en la casa, los profesionales de la salud mencionaron que la familia se dedica a la producción de jabón, y que este químico es parte de dicha actividad.

La botella se encontraba sobre el ropero de la habitación de los niños. 

 

Barreras culturales

En diálogo con el Dr. Carrizo y el Dr. Asselborn mencionaron que la comunicación fue exclusivamente por la cabecera de la familia, el hombre. Ya que pertenecen a una comunidad Menonita y solo el hombre entiende y habla español. 

“La madre habla un dialecto del alemán y culturalmente ellos se comunican mediante la figura del padre. La niña tampoco lo habla y el niño de 3 lo aprendería durante sus estudios. Esto también le agrega cierto tipo de notoriedad al caso”, dijo el Dr. Carrizo.

 

Contención familiar

Los médicos del interior quienes estuvieron con la familia desde el comienzo fueron quienes llevaron a cabo la contención emocional, hablaron con los padres e  informarles que vienen otros profesionales del Cepsi a intervenir en el caso; “de eso se encarga el médico que recibe al paciente en el interior”, explicó el Dr. Juan Asselborn.

“Nosotros llegamos directamente a trabajar sobre el niño que está grave y como antes mencionado, el tiempo es prioridad. En consecuencia, uno a veces no tiene tiempo de comunicarse de manera puntualizada con la familia, sino que uno llega e inmediatamente, evalúa la situación y comienza a trabajar para procurar que siga respirando”, finalizó el Dr. Asselborn.

 

 

 

 

Cepsi
Comentarios

Te puede interesar

Teclas de acceso