Amnistía Internacional publicó un informe lapidario contra el protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich y el accionar de las fuerzas de seguridad durante la represión a diferentes movilizaciones que se realizaron en contra del Gobierno durante 2024. En el documento, la organización internacional advirtió sobre un uso “excesivo” e “ilegítimo” de la fuerza para reprimir la protesta social.
En un relevamiento de 15 movilizaciones que se realizaron el año pasado, publica el sitio Diagonales, Aministía Internacional contabilizó más de mil personas heridas como consecuencia del accionar policial. “Desde el inicio de la gestión del presidente Javier Milei, al menos 15 protestas en la Ciudad de Buenos Aires fueron reprimidas de manera excesiva e ilegítima por las fuerzas de seguridad contra personas que ejercen el derecho a manifestarse pacíficamente, restringiendo el ejercicio de la libertad de expresión”, denunció la ONG.
A su vez, la ONG señaló que de las más de 1000 personas que resultaron heridas como consecuencia de la represión, 35 fueron profesionales de la comunicación que cubrían las protestas. “Desde enero de 2024 han resultado heridos numerosos periodistas, movileros, camarógrafos y trabajadores de prensa, quienes estaban trabajando y cubriendo las distintas manifestaciones; solamente considerando las protestas en la plaza del Congreso mientras se debatía la ley ómnibus, se contabilizaron 35 periodistas o comunicadores sociales que fueron agredidos mientras cumplían sus funciones”, señaló el documento.
Además, consideró que el mismo "fija pautas de actuación policial y estatal que vulneran el derecho a la libre reunión y asociación, libertad de expresión y de protesta social”.
Sin embargo, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, rechazó las críticas de Amnistía Internacional y consideró que el informe era un documento “ideologizado”.
“No avalamos para nada ese informe. Este es un año en el que la Argentina logró ley y orden, y logró que los ciudadanos puedan transitar las calles, y lo hizo con el uso mínimo de la fuerza, y lo hizo de una manera profesional”, afirmó en diálogo con La Nación. “Es un informe total y absolutamente fuera de lugar, y que además está totalmente en contra de lo que piensan 46 millones de argentinos”, completó.