Las defensas técnicas de una mujer acusada de hacer prostituir a sus hijas, y de los sujetos que accedían carnalmente a las menores a cambio de distintas sumas de dinero, todos oriundos de una localidad del departamento Figueroa, se opusieron a la elevación de la causa a juicio oral y solicitaron dictar el sobreseimiento para sus asistidos, entre otros requerimientos, que la fiscalía pidió que les sean rechazados.
La Dra. Sara María Harón, jueza de Control y Garantías para la Circunscripción Capital, decidió diferir la resolución, requiriendo la remisión de las Cámaras Gesell realizadas a las víctimas, a los fines de escucharlas, y luego resolverá sobre los planteos efectuados.
Cabe señalar que los imputados enfrentan graves acusaciones, tales como promoción y facilitación de la prostitución agravado, corrupción de menores agravado, abuso sexual con acceso carnal agravado en grado de partícipe necesario —la madre de las víctimas— y de abuso sexual con acceso carnal los sujetos que las sometían sexualmente a cambio de dinero.
El requerimiento fiscal
En el transcurso de la audiencia de ayer, la Dra. Jésica Lucas —integrante de la Unidad Fiscal para delitos contra la integridad sexual— enumeró las piezas probatorias colectadas durante la investigación penal preparatoria, y solicitó que sean admitidas. Finalmente solicitó a la magistrada que eleve a juicio la causa con dichas acusaciones.
La representante del Ministerio Público Fiscal consideró que se han acreditado los hechos y las responsabilidades de los acusados como autores de los graves ilícitos.
Planteos de las defensas
Las defensas de los inculpados se opusieron al requerimiento de la fiscal, y pidieron el sobreseimiento basados en el hecho de que —al exponer en Cámara Gesell— las menores no mencionaron a los inculpados como quienes las accedieron, y además dijeron que la madre nunca las prostituyó, manifestando que la inculpada nunca les haría eso.
Denuncia de una joven
El caso salió a la luz luego de que una joven que vivió con la acusada y las menores, a las que sacaba a la calle y a fiestas, lo cual enojó a la madre de las chicas y le pidió que se fuera de la casa. La joven se fue y la denunció.