Un incalificable individuo identificado como Miguel Ángel Ramírez, residente en el barrio Banda Verde de la localidad de Choya, en el departamento homónimo, fue detenido luego de protagonizar un brutal episodio.
El mencionado había estado bebiendo y mantuvo una pelea con su pareja, una mujer de apellido Padilla, quien al advertir que el hombre estaba fuera de sí, llamó a la Policía.
Sin embargo, esto encolerizó aún más a Ramírez, quien prendió fuego en la vivienda. Las llamas pronto comenzaron a expandirse, y lejos estaba de terminar la odisea.
Al llegar los uniformados, el sujeto tomó a su bebé de un año y meses en brazos, y le puso un cable en el cuello, amenazando con matarlo si la Policía no se retiraba.
Sin embargo, unos minutos más tarde, finalmente fue inmovilizado y trasladado a sede policial en calidad de aprehendido.
La mujer pretendió retirar la denuncia días después, pero las actuaciones continúan y la aprehensión fue convertida en detención por la jueza Roxana Cejas Ramírez.
