Un indignante suceso dejó con bronca e impotencia a los vecinos de Salta, cuando un violento se presentó en la casa de su ex pareja, la "molió" a golpes y le arrojó agua hirviendo en la cara. El hombre quedó libre.
Según trascendió, la víctima tuvo que escapar a su ciudad de origen, en el sur del país, debido a que temía que el hombre termine asesinándola, ya que ni siquiera fue preso.
Cuando la agredida radicó la denuncia, tomó intervención la fiscal de Violencia Familiar y de Género 2, Luján Sodero.
Durante el juicio, en la Sala 3 del Tribunal del Juicio, determinaron que la condena del sujeto correspondería a un año y seis meses de prisión de ejecución condicional, además de reglas de conducta por las lesiones agravadas en perjuicio de su ex pareja.
Esto signfica que, a pesar de que agredió salvajemente a la víctima y atentó contra su vida, no debe cumplir tiempo efectivo tras las rejas, quedando libre sujeto a condiciones de conducta.
La mujer, mientras reclama justicia, huyó al sur del país, de donde es oriunda, para esconderse del agresor, quien además la tiene amenazada de muerte.
