El Ministerio de Salud de la Nación destacó la influencia sanitaria positiva que puede tener el aumento a los impuestos del tabaco.
El Ministerio de Hacienda y Finanzas Públicas de la Nación concretó un aumento que eleva al 75% la alícuota de impuestos internos, medida que impactará en el precio de venta final de los productos de tabaco en un 53,6%.
Este gravamen es una de las acciones que alienta el Convenio Marco para el Control del Tabaco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el objetivo de reducir la demanda de tabaco.
“Desde el Ministerio de Salud de la Nación celebramos esta noticia ya que, pese a no haber firmado el Convenio Marco de Control del Tabaco, en Argentina venimos tomando las medidas recomendadas por el mismo.
En cuanto a impuestos, teníamos una enorme deuda y esta noticia de Hacienda nos acerca más a saldarla y nos encamina en una política de alto impacto sanitario”, destacó Marina Kosacoff, subsecretaria de Prevención y Control de Riesgos de la cartera sanitaria nacional.
“Los impuestos al tabaco son más que recaudatorios, su aumento tiene impacto sanitario, ya que desalientan a consumidores actuales, favorecen la cesación tabáquica y disuaden a los jóvenes a iniciarse en el consumo, profundizando la tendencia en descenso del consumo que actualmente observamos”, comentó Marta Angueira, coordinadora del Programa Nacional de Control del Tabaco de la cartera sanitaria nacional. “Queda ahora aplicar el protocolo de comercio ilícito para continuar con las directrices de OMS”, completó.
De ese modo, en la sede del Ministerio de Salud de la Nación, en reunión extraordinaria la Comisión Asesora para el Control del Tabaco presentó una investigación del Instituto de Efectividad Clínica y Sanitaria, que afirma que “un aumento de tan sólo un 50% podría llegar a evitar más de 25.000 muertes, 42.000 infartos, 11.000 nuevos cánceres y eliminar casi 15.000 ACV en diez años”.
¿Cuáles son los beneficios?
En cuanto a los beneficios:
* A 20 minutos el ritmo cardíaco y la presión arterial bajan.
* Al otro día dejan de perder color blanco los dientes, y ya no se tiñen los dedos. Se recupera el sabor y olor pleno de los alimentos.
* En 2 a 3 meses la circulación sanguínea y función pulmonar mejoran, baja el cansancio.
En pocos meses menos tos, cansancio y dificultad respiratoria.
* Al año: el riesgo de enfermedad coronaria disminuye a la mitad.
* A los 5 años: el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago y vejiga disminuye a la mitad y el de cáncer de cuello y de ACV se iguala al de un no fumador.
* A los 10 años: el riesgo de cáncer de pulmón disminuye a la mitad y también el de laringe y páncreas.
* A los 15 años: el riesgo de enfermedad coronaria es similar al de un no fumador.
El consumo fue en descenso, en especial en la población joven
Además, “se podrían generar recursos por $85.000 millones, cifra derivada del ahorro en gastos sanitarios y del aumento en la recaudación impositiva”, agrega el estudio. La investigación fue realizada por un equipo de más de 40 investigadores y decisores sanitarios de universidades, centros de investigación e instituciones públicas de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Perú y México.
La OMS recomienda la suba de los impuestos como una estrategia eficaz para reducir la demanda de los mismos, contribuir a mejorar los resultados sanitarios y prevenir la iniciación en el consumo. En el país, el consumo de tabaco se encuentra en permanente descenso en todas las provincias.
De acuerdo a los datos de las Encuestas Nacionales de Factores de Riesgo (ENFR), en 2005 el 29,7% de la población fumaba, mientras que en 2013 ese porcentaje disminuyó al 25,1%.
En los jóvenes se repite la tendencia, así mientras en 2007 el 24,5% de los jóvenes afirmó que fumaba, en 2012, el porcentaje disminuyó al 19,6%, según la Encuesta Mundial de Tabaquismo en Adolescentes realizada en el país, lo que representa una reducción del consumo de más de 30 mil jóvenes de entre 13 y 15 años.