La Justicia argentina ha emitido una condena de dos años y un mes de prisión en suspenso para Sebastián Villa, delantero de Boca Juniors, por amenazas coactivas y lesiones en el contexto de violencia de género. Aunque no será encarcelado, se le impondrán dos años de reglas de conducta. Ante esta situación, los dirigentes del club tienen varias opciones en cuanto al futuro del jugador: esperar a que su abogado apele la sentencia, rescindir unilateralmente el contrato, mantener el vínculo hasta el 31 de diciembre de 2024 o venderlo a otro club en el extranjero.
En cuanto a la posibilidad de que Villa siga jugando al fútbol, la sentencia en primera instancia no inhabilita sus derechos laborales, por lo que podría continuar su carrera en Argentina o en cualquier otro club del mundo. Sin embargo, es probable que pocos clubes estén dispuestos a contratar a un jugador con una condena por violencia de género. Tal vez países con legislaciones más flexibles, como Arabia Saudita, Asia o Europa Oriental, podrían ser opciones viables si ofrecen un buen contrato.
La Justicia no intervendría en la elección del nuevo club de Villa ni en el monto de su transferencia. Solo debería otorgarle la autorización de salida y residencia en caso de que la solicite. Como ejemplo, Alexis Zárate, exjugador de Independiente y Temperley, jugó en Letonia con una condena de seis años y medio de prisión. Sin embargo, cuando se confirmó su condena en Argentina, tuvo que regresar y cumplir la pena.
Es importante tener en cuenta que la condena a Villa será un antecedente de cara al próximo juicio que enfrentará por abuso sexual con acceso carnal. Si el nuevo tribunal lo condena por segunda vez y ambos delitos superan los tres años de pena, no podrá eludir la prisión por compensación de pena.
La postura inmediata de Boca Juniors ante la condena de Sebastián Villa es no emitir ningún comunicado oficial debido a que la sentencia no está firme y se espera la apelación. Villa continuará entrenando con el plantel profesional, pero no será convocado para los partidos, como ya ha sucedido en ocasiones anteriores. Aunque no jugará más en Boca Juniors, existe la posibilidad de que el club lo venda si llega una oferta por él.
