La Iglesia Católica celebró ayer la fiesta más importante del calendario litúrgico: la Pascua. Hubo vigilias en todos los templos de la ciudad y ayer se realizó la misa, con la lectura del Evangelio del anuncio de la resurrección de Jesús.
A la mañana, monseñor Vicente Bokalic, obispo de la Diócesis de Santiago del Estero, junto con el hermano Cristian Viscardi, visitó el Centro de Guarda, Custodia y Tratamiento de Adolescentes en conflicto con la Ley.
Allí, el prelado ofició la santa misa y dialogó con los jóvenes sobre sus problemas e inquietudes. Monseñor Bokalic les llevó un mensaje de esperanza y amor, y los instó a comenzar una vida nueva a partir de la Pascua.
A la tarde, el obispo diocesano celebró la Eucaristía en la Catedral Basílica. El templo estuvo colmado de feligreses, quienes se acercaron a celebrar la “fiesta de las fiestas” e iniciar así el Pentecostés, que marca la ascensión de Jesucristo a los cielos.
Durante su homilía, monseñor Bokalic leyó el mensaje pascual, exhortándolos al diálogo y a la resolución pacífica de los conflictos.
Aseveró que el incremento de la violencia es una de las periferias sobre la que deben trabajar los cristianos. “Debemos ponernos en camino y no instalarnos y acomodarnos en nuestros lugares y posiciones. Debemos salir de nuestros aislamientos, miedos, inseguridades, de refugios donde nos sentimos bien y no miramos tanto dolor y marginación que nos rodea”, señaló el obispo.
