Ayer en horas de la mañana, vecinos de Colonia Libanesa y zonas cercanas de la localidad del departamento Avellaneda, fueron testigos de la primera helada de este año, ya que fueron sorprendidos por una postal completamente blanca.
Eran cerca de las 7.30 cuando los termómetros marcaron -2 ºC, una temperatura que dejó su huella en campos, techos y parabrisas cubiertos de escarcha.
El fenómeno no pasó desapercibido. Las imágenes de pastizales helados y superficies congeladas se multiplicaron en las redes sociales, donde los habitantes comentaban con asombro la crudeza del frío.
"Salimos temprano y estaba todo blanco. No esperábamos tanto frío tan de repente", contaron vecinos de la zona rural, acostumbrados a los fríos invernales pero no tan temprano en la temporada.
Aunque las heladas son habituales entre los meses de junio y julio, la aparición anticipada del hielo encendió las alarmas entre los productores agropecuarios, preocupados por el impacto en los cultivos sensibles y en el ganado. "Cuando el invierno se adelanta así, no siempre da tiempo a prepararse", comentaron algunos referentes del sector.
El episodio no fue exclusivo de la localidad de Colonia Libanesa. Localidades rurales de Aguirre, Rivadavia, General Taboada, Moreno y Juan Felipe Ibarra también reportaron temperaturas bajo cero.
En las afueras de Icaño, incluso, los registros marcaron -2,5 ºC, con una sensación térmica más baja aún por la influencia de vientos del sur-sureste.
Este primer gran descenso térmico del año deja en claro que el invierno ya comienza a hacerse sentir en el interior santiagueño, con señales claras de que podría ser una temporada especialmente rigurosa.
