
Un domingo atípico fue el de este 22 de diciembre en el microcentro capitalino de Santiago del Estero, donde se pudo observar bastante movimiento de gente y muchos negocios abiertos.
Una jornada particular en el microcentro, motivada por la proximidad de las fiestas de fin de año y la necesidad de los comerciantes de vender lo máximo posible, en el cierre de un año difícil.
Un domingo atípico fue el de este 22 de diciembre en el microcentro capitalino de Santiago del Estero, donde se pudo observar bastante movimiento de gente y muchos negocios abiertos.