Como es de costumbre para esta fecha, los comercios de alquiler de disfraces trabajan arduamente para satisfacer la demanda de las instituciones en mayor medida.
En la ciudad son muy pocos los locales dedicados a la fabricación y alquiler de trajes, por lo que su actividad de venta es alta.
El alquiler de disfraces para niños cuesta $150 y se lo puede tener durante 3 días, siempre y cuando dejando copia de la documentación personal del responsable.
En caso de desear comprar el traje valen desde $ 600, según el personaje que se requiera.
“Todos los años aumentamos la cantidad de fabricación, pero igual no nos alcanza debido a la gran demanda, la mayoría alquila, pero si hay quienes prefieren comprarlos”, expresaron las propietarias de un comercio.
“Nuestros principales clientes son del interior y de la Capital, ya que según ellos, aquí es más económico”, agregaron.
Destacaron que grados completos hicieron pedidos de alquiler, como así también hubo ocasiones que no les devolvieron los trajes.