El pasado 3 de marzo, el intendente de Añatuya, Héctor “Pocho” Ibáñez, brindó su mensaje anual cargado de “falacias e inexactitudes”, según concejales de distintos bloques de la ciudad.
Los integrantes del Deliberante añatuyense desmintieron los dichos de Ibáñez respecto a la pandemia del Covid-19, teniendo en cuenta que el jefe comunal precisó que “el Concejo Deliberante dejó al Ejecutivo en soledad” en medio de la lucha de la pandemia. Los ediles afirmaron a través de un comunicado formal que solicitaron “formar parte del Comité de Emergencia local”, petición “que nunca fue contestada”, indicaron.
Por otra parte, ratificaron que en referencia a Contaduría Municipal, se concretó la renuncia de la contadora Zulma Vera, “hecho que nunca informó a este cuerpo, y lo que es más grave aún, en su aseveración respecto a que ese cargo requiere acuerdo” del cuerpo legislativo, remarca el escrito difundido ayer.
El fuerte comunicado afirma que Ibáñez “incurre en falsedad cuando manifiesta que el Presupuesto 2022 nunca fue tratado” por los ediles, destacando que el mismo “fue tratado en tiempo y en forma”, diciendo que “fue girado por el mismo intendente con tratamiento de urgencia”.
Por otra parte, “también de forma maliciosa y descaradamente ha mentido, al decir que el Concejo Deliberante no aprobó la conformación del Tribunal de Cuentas Municipal, aduciendo falta de respuestas a los informes solicitados”, mencionando que son “argumentos sin asidero” válido.
Por último, indican que Ibáñez “nunca efectuó las rendiciones de su administración” del Fondo de Financiamiento Educativo, motivo por el cual “no percibe” los fondos antes mencionados.
