Los alumnos de 5º año del colegio secundario Mons. Weimann de esta ciudad quisieron que la presentación de sus camperas sea con un gesto solidario y por ello decidieron compartir su alegría con los chicos que asisten al taller de Rehabilitación Integral.
La tradicional “ceremonia” de camperas y remeras de los egresados 2018 se realizó el viernes a la mañana en el salón escolar, con la presencia de sus padres y compañeros y con los chicos del taller como invitados principales a esta fiesta, con quienes salieron a las calles a pintar rampas de uso especial de sillas de rueda existentes en el casco céntrico. En total fueron pintadas 35 en toda la ciudad.
A través de los medios y redes sociales fue celebrada la decisión de los estudiantes, quienes quisieron dejar una huella distinta en la comunidad a través de su gesto y en un contexto de celebración tan especial para ellos.
En este sentido, desde la institución remarcaron la importancia de formar a los estudiantes desde la solidaridad y que “sean ellos mismo los que tengan la oportunidad de experimentarlo y ponerlo en práctica”.
Los chicos se mostraron entusiastas con esta tarea, especialmente porque “la propuesta se irá transmitiendo a los futuros egresados, quienes tomarán el ejemplo para seguir el mismo camino. Es algo realmente alentador”, afirmaron.