En un clima de alta expectativa y tensión política, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, arribó esta tarde a la sede del Partido Justicialista (PJ). La llegada del mandatario provincial ocurre en medio de la espera por un fallo clave de la Corte Suprema de Justicia, que podría tener profundas implicancias para el escenario político nacional.
La ciudad se encuentra atravesando una jornada cargada de incertidumbre, en lo que muchos ya califican como un día histórico para la política argentina. Militantes, dirigentes y medios de comunicación se concentraron en los alrededores del edificio partidario, atentos a cualquier señal o declaración.
Kicillof evitó hacer comentarios al ingresar, aunque su presencia refuerza la importancia del momento institucional que atraviesa el país. Se espera que en las próximas horas haya definiciones que podrían marcar un antes y un después en el mapa político nacional.
