Un hombre se presentó en un hotel de Las Termas junto con su hijo y solicitó alojamiento. Los pasajeros permanecieron sin levantar ninguna sospecha.
El menor se retiró un día después, mientras que su padre siguió alojado por tres días y realizó pedidos para la habitación.
Sin embargo, en un momento, el sujeto desapareció y nunca más regresó para pagar la cuenta que supera los $ 30 mil.
La gerencia del hotel de la calle San Lorenzo del barrio Centro esperó en vano el regreso del pasajero y realizó la denuncia en la Comisaría Nº 50. Ya habría estafado a otros hoteleros.