La defensa técnica de una mujer condenada a cumplir la pena de 8 años de prisión, tras ser considerada culpable de haber encubierto los ataques sexuales —en manada— que sufrieron dos de sus hijas, por parte de su concubino y varios hermanos de este, expresó agravios y requirió nulificar la sentencia porque no se ha investigado el hecho con una perspectiva de género, ya que la condenada también era víctima de violaciones y agresiones, aseverando que ella estaba impedida de denunciar.
Tal planteo fue concretado por los Dres. Víctor Nazar y Francisco Palau (h), abogados defensores de Ana María Legido, quien había sido condenada como partícipe primario de los abusos sexuales que sufrieron sus hijas.
El 17 de noviembre de 2021, Legido fue condenada por el tribunal que integraron los Dres. María Eugenia Carabajal, Raúl Santucho (h) y Luis Ariel Domínguez, en un veredicto que se adoptó por mayoría de votos ya que la magistrada había opinado que la inculpada debía ser condenada a 9 años y 6 meses de prisión.
Caminan 10 km y avisan
En junio de 2017, tres de las víctimas decidieron huir de la casa y caminaron 10 kilómetros para pedirle auxilio a una tía paterna, a quien le contaron los suplicios que tuvieron que soportar.
Tras tomar intervención en el caso, la fiscal Andrea Juárez ordenó que se realicen exámenes médicos a las menores, y que estas expongan en sendas Cámara Gesell.
Ayer, la fiscal Andrea Juárez se opuso al planteo de la defensa y solicitó confirmar la condena para Legido.
Tras escuchar las posturas de ambas partes, el Tribunal de Alzada difirió la resolución para una fecha a fijar.