Una mujer de 43 años y de apellido Amaya, domiciliada en El Bobadal (Dpto. Jiménez), radicó denuncia en la Comisaría 53ª tras sufrir la sustracción de 20.000.000 de pesos que tenía guardados en un placard.
La víctima relató que cuando advirtió el robo, en la casa estaban su esposo -de apellido Melián- y un hermano de este, aunque ambos se encontraban en la planta baja, por lo que descartaba la posble responsabilidad de alguno de ellos.
Además, explicó que la ventana de la habitación donde se encontraba el placard no estaba cerrada con traba, por lo que intuía que el delincuente había ingresado por allí sin necesidad de violentar ningún acceso.
Una vez radicada la denuncia, el fiscal Rafael Zanni ordenó varias medidas a seguir, entre ellas, trabajos de Criminalística y que la Brigada de la antes mencionada seccional se aboque a las averiguaciones correspondientes.
Fueron precisamente dichos efectivos quienes determinaron que el ladrón sería un joven identificado como Rodrigo Alejandro Correa (22), cuya vivienda allanaron y lo apresaron. Sin embargo, en su casa no hallaron el botín, como tampoco en la de sus progenitores.
Los uniformados tomaron varias entrevistas en la zona y un muchacho reveló algo crucial. Este manifestó que poco antes había estado bebiendo con Correa y este le confesó que había sustraído el dinero y pensaba gastarlo íntegramente en la provincia de Tucumán, para evitar sospechas en El Bobadal.
En las próximas horas habría nuevos procedimientos para intentar dar con la cuantiosa suma de dinero.
