A golpes, una mujer fue despertada por su expareja. Le dio una paliza y luego le juró que “la mataría”. Escapó y a las horas, regresó a la casa, tratando de cumplir con su “promesa”. Fue detenido.
Luego de varios años de relación, una joven de 26 años, residente en el barrio Santa Rosa de Lima de la Capital, decidió poner fin a la relación que la unía a su expareja. De por medio, hubo una denuncia por violencia de género, por la que el agresor estuvo detenido. Posteriormente, fue excarcelado con una perimetral a favor de la joven. Además, la Justicia le puso una tobillera electrónica que es monitoreada por la Policía.
La víctima pensó que tras la resolución judicial, su calvario había terminado. Pero no. El sujeto le había jurado en varias oportunidades que “la iba a matar”. Por lo que ebrio y drogado, llegó a la casa de la mujer, cerca de las dos de la madrugada de anteayer. La víctima dormía, cuando sintió que comenzó a faltarle el aire.
Ataque
Al despertarse, encontró al sujeto encima de ella. Según consta en la denuncia realizada en la Comisaría Comunitaria 10, el agresor comenzó a golpearla. Le propinó trompadas en el rostro y en la cabeza, mientras la insultaba y continuaba diciéndole que “la asesinaría”.
Tras el ataque, el agresor se dio a la fuga con rumbo desconocido, mientras que la mujer alertó a la Policía sobre lo que había sucedido. En tanto, los uniformados de la División Prevención de la Departamental Nº 17 del barrio Belén se presentaron en la vivienda, donde entrevistaron a la damnificada. La mujer, en ese momento, se dirigió a la sede policial donde radicó la denuncia penal en contra del agresor.
Entre lágrimas y en crisis de nervios, la mujer les dijo a los policías que “el sujeto ya estuvo detenido por una causa de violencia de género y que no sabía que más hacer al respecto para que no continuara sufriendo ese tipo de agresiones de su parte”.
Ante la situación, los uniformados se comunicaron con el fiscal de Género de la Capital, quien dispuso que se iniciaran las averiguaciones pertinentes con el fin de llevar a cabo la aprehensión del agresor. Mientras que los “guardianes del orden”, con intervención de la Fiscalía, iniciaron las averiguaciones para procurar establecer el paradero del sujeto.
Regresó a golpearla
Cerca de las la dos de la tarde del jueves, los uniformados realizaban la constatación de los daños realizados por el sujeto en la casa de la denunciante. Para ingresar al inmueble a la madrugada, el agresor había violentado la puerta de acceso, la que estaba rota.
En ese momento, al arribo de los uniformados, encontraron al agresor que estaba ingresando nuevamente al inmueble de la víctima. Al verse sorprendido por los efectivos, el sujeto intentó darse a la fuga a la carrera del sitio.
Fue interceptado a los pocos metros. Por lo que comenzó a forcejear con los efectivos tratando de escapar del sitio. Puso resistencia, intentado lesionar a los uniformados, mientras los amenazaba de muerte.
Los vecinos, ante la situación, comenzaron a acercarse al sitio con intenciones de ayudar al agresor para que pudiera fugarse. Fue inmovilizado y trasladado a la sede policial, donde quedó alojado por disposición de la Fiscalía.
Los efectivos a cargo del procedimiento también radicaron la denuncia en contra del agresor. Por lo que, además de desobediencia judicial, fue imputado de atentado y resistencia a la autoridad policial.
El mismo será indagado los próximos días. En tanto, los efectivos realizaron los trabajos de fotografías y planimetrías en el inmueble de la damnificada.
En las próximas horas se llevará a cabo la elaboración de un informe socio-ambiental y un relevamiento vecinal en domicilio de la víctima, por orden judicial.
