Un funcionario del Servicio Penitenciario provincial, que se desempeña en la Unidad Penal de Colonia Pinto, fue detenido ayer luego que agrediera a su expareja e intentara suicidarse a modo de coacción, para que la víctima acepte reanudar la relación, que culminó en octubre de 2024, luego que la joven descubriera que le era infiel. No obstante, a causa de los constantes hostigamientos del sujeto reiniciaron la relación en noviembre.
El 14 de febrero último él se puso cariñoso, pero ella lo rechazó. El sujeto le aplicó una cachetada y luego quiso suicidarse con una sábana pero desistió. Luego se produjo una nueva discusión, pero intervino la madre de la joven y el sujeto se fue.