Una beba de diez meses, que a principios de semana fue internada con una fractura de cráneo en Hospital Pediátrico de San Luis, se encuentra hoy en grave estado y con pronóstico reservado. Si bien su madre y la pareja de esta sostuvieron se debió a un accidente doméstico, se inició una investigación ya que no es la primera internación que sufre la menor.
El domingo último, la niña fue llevada por su mamá al Hospital Cerro de la Cruz, donde llegó sin signos vitales y debió ser reanimada.
La paciente ingresó a la terapia con diagnóstico de traumatismo y fractura de cráneo, y desde entonces se encuentra sedada y conectada a un respirador artificial.
Lo que alertó a los médicos fue que hace aproximadamente tres semanas la pequeña había sido enyesada en una de sus piernas por una fractura.
Ante esto, la fiscalía de Instrucción 1 y el personal de la Comisaría 38ª de San Luis investigan las circunstancias en las sufrió lesiones graves que la dejaron en terapia intensiva, bajo la calificación de “averiguación lesiones gravísimas”.
Según las fuentes, la niña fue trasladada ayer al Hospital Pediátrico con un edema cerebral, hematoma subdural en la cabeza, fractura de cráneo y un hematoma en el rostro y otro en el pie derecho, con entre cuatro y cinco días de antigüedad.
La versión de la madre de la beba
Según el relato de la madre, el domingo a la madrugada la pequeña se habría caído de su cama, luego siguió durmiendo y cerca del mediodía comenzó a convulsionar, por lo que a las 17 fue trasladada a un centro de salud, para ser trasladada luego por su gravedad al Hospital Pediátrico de la ciudad de San Luis.
Hace aproximadamente tres semanas, la pequeña tuvo que ser enyesada en una de sus piernas por una fractura. En ese momento, su mamá argumentó que otras de sus hijas y unos sobrinos pisaron a la bebé mientras saltaban en la cama en la que estaba recostada.
La justicia, sin tener una denuncia formal, recabó testimonios del grupo familiar, el entorno de la nena y la pareja de la madre junto a vecinos y vecinas.
El domingo último se inició una inspección ocular en la vivienda del barrio Justo Daract con intervención de la División Criminalística y la fiscal del caso se entrevistó con la abuela materna y a una tía de la criatura.
