Un empresario santiagueño es uno de los doce detenidos por el secuestro de más de 1.658 kilos de cocaína de máxima pureza que era trasladada hacia Dubai desde el noreste de Rosario —provincia de Santa Fe—.
Según destaca en su actividad comercial declarada ante la AFIP, el detenido se dedica al cultivo de soja y maíz; en el rubro agricultura, ganadería, caza, pesca y silvicultura. Pero además, se dedica a brindar asesoramiento, dirección y gestión empresarial para integrantes de órganos de administración y/o fiscalización en sociedades anónimas.
El agricultor es propietario de una firma que se dedica a exportar maíz y soja, que se encuentra instalada en la localidad de Los Juríes —departamento General Taboada—. Fue detenido durante un allanamiento, a partir del secuestro del cargamento de estupefacientes valuado en más de 450 millones de dólares.
Según se desprende de la investigación que lleva a cabo la Dirección General Antidrogas del Paraná en Superintendencia de Drogas Peligrosas de la Policía Federal bajo las órbitas del juez Federal Adrián González Charvay y el área de narcocriminalidad de la AFIP/Aduana; el santiagueño tendría como tarea oficiar de operador registrado para mover los granos en barco a Medio Oriente. El rol que el santiagueño tendría en la organización fue descubierto por el personal de Aduanas, por la documentación incautada en la investigación. Aunque los investigadores trata de determinar la vinculación directa o indirecta del detenido en la causa.
De la pesquisa, que surgió de una causa por drogas iniciada en junio de 2021 y que se reactivó en abril de este año, se desprende que la cocaína iba a ser exportada a España camuflada en la carga de una empresa conformada hace poco más de un año con el fin de realizar envíos de estupefaciente a Europa en cargamentos de “Expelet”, un alimento balanceado realizado a base de maíz y fabricado por una cerealera cercana a Bahía Blanca, cuyos dueños son poseedores de un depósito de grandes dimensiones en la ciudad cordobesa de Villa María.
En ese marco, el “golpe” al narcotráfico se dio en la madrugada de ayer cuando se allanó en Rosario, un galpón ubicado en calle Génova al 2400 en el barrio Empalme Graneros.
La droga —que estaba guardada en 19 bolsones de 1.250 kilos de mercadería— estaba distribuida en 680 paquetes, ocultos en seis contenedores que contenían aproximadamente 150 toneladas de maíz y alimento balanceado; mercadería que iba a ser enviada a Dubai en barcos a través de hidrovías del Paraná.
De inmediato, se realizaron 29 allanamientos entre Rosario, Santiago del Estero, Villa María, Victoria, Bahía Blanca y Capital Federal. En total, los investigadores procedieron a la detención de doce personas —todos vinculados al narcotráfico—.
Según se conoció, el lote de cocaína tendría como principal destino Medio Oriente y su destino sería “alimentar a los turistas que asistan al Mundial de Fútbol Qatar 2022”.
Los paquetes tenían el sello de las marcas de carteras Gucci y Louis Vuitton y podría alcanzar un valor de 450 millones de dólares en el mercado europeo, en términos de mayorista “dealer”. Su valor en Medio Oriente —con restricciones mucho más fuertes y mayor distancia de tráfico— podría ser el doble o más su valor final.
José “El Tano” Sofía entre los detenidos
El detenido número doce de la organización narcocriminal desbaratada con más de 1.600 kilos de cocaína, es José Damián Sofía, conocido como “El Tano”, de 57 años y residente en la provincia de Buenos Aires.
Sofía, en 2018, fue sindicado como el anónimo que llamó y amenazó a la jueza Federal Sandra Arroyo Salgado, quien en ese momento lo investigaba por los crímenes de su exchofer y la pareja del trabajador luego que “un negocio saliera mal”.
Según la acusación que pesa en su contra, Sofía habría llamado al Juzgado Federal N° 1 de San Isidro y le dijo a una de las secretarias, que era “un mensaje de la familia de Sancho —un narco detenido—”. Luego pronunció: “O liberan a todos o a la jueza le va a pasar como a Nisman”. También incluyó en su presunta amenaza a las hijas del fiscal.
Autos de alta gama, dinero y celular
Durante los 29 allanamientos realizados de manera simultánea, los efectivos secuestraron celulares y material de almacenamiento de información, que serán analizados para conocer los nexos que la organización tenía tanto en España —a donde hacía un transbordo la droga— y luego, Medio Oriente. También automóviles de alta gama, armas automáticas y dos vehículos utilitarios que poseían doble pared de fondo y que los detenidos utilizaban para el traslado de los estupefacientes.
Al momento del procedimiento, uno de esos rodados cargado con otros 50 kilos de cocaína que, se presume, iban a ser comercializados en Rosario.
Además, se procedió al secuestro de una importante cantidad de dinero distribuidos en euro, dólares, guaraníes, pesos argentinos y reales; y documentación para avalar las conformaciones de las empresas y las operaciones de exportación.