
Un alumno de sexto grado de una escuela del barrio bonaerense de Haedo fue expulsado luego de incontables testimonios de sus compañeros, quienes lo acusan de violencia y abuso.
Fueron los padres quienes presionaron a las autoridades educativas para que escuchen su pedido y terminen echando al alumno de la institución.
Según los testimonios de los indignados progenitores, sus hijos ya no quieren ni asistir a clases. De hecho, comentan que un día los nenes abandonaron la institución llorando y al día siguiente sólo asistieron dos.
Además, los alumnos manifestaron estar cansados de que "la maestra no haga nada" y aducen que "se tienen que defender entre ellos".
Ante tal situación, fue que los adultos tomaron cartas en el asunto y se pusieron en contacto con las autoridades de la escuela primaria Nº 47, ubicada en el mencionado barrio del partido de Morón.
Entre los horrores descritos por los nenes, contaron que el agresor abusaba reiteradamente de sus compañeritas y que "les sacaba los útiles y se los metía en sus partes íntimas".
"Después de eso, los volvía a meter en las cartucheras y se reía mientras sus compañeros los usaban", agregaron.
Otra de las madres expuso que su hijo a veces llegaba con hematomas producidos por los golpes que le propinaba el acusado, y que "las profesoras siempre minimizaban la violencia y nunca hicieron nada".
Sin embargo, la peor de las aberraciones que contaron las nenas del curso es que las manoseaban constantemente y que "les apoyaba los genitales en la cola".
Como consecuencia de las protestas presenciales y la denuncia radicada, las autoridades del establecimiento se vieron obligadas a expulsar al chico del colegio.