El mecánico Ramiro Muratore, quien está acusado de haber agredido a su expareja (de profesión arquitecta) y en un caso posterior también agredió a su novia, luego de lo cual se sacó la tobillera electrónica que le habían colocado, para después huir del hotel capitalino donde se habían alojado con la joven, permanecerá detenido y volverán a colocarle el dispositivo de control, por orden del Dr. José Luis Torrelio, juez de Control y Garantías para la Circunscripción Banda y Robles.
En una audiencia realizada hoy en la mañana, la Dra. Ximena Jerez -representante del Ministerio Público Fiscal- pidió que Muratore siga privado de la libertad, y que se le coloque nuevamente la tobillera electrónica, en tanto que la defensa requirió la excarcelación del inculpado.