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Policiales El procedimiento fue realizado por el personal de la División Sustracción de Automotores

Incautaron de la puerta de un taller mecánico un auto robado

El vehículo tenía pedido de secuestro de la Policía Federal desde el año pasado por robo.

En un recorrido de rutina que los efectivos de la División Sustracción de Automotores realizaron por las calles de la Capital detectaron un automóvil robado meses atrás y que estaba estacionado en la puerta de un taller mecánico.

Los controles son dispuestos por las autoridades de la Dirección General de Investigaciones de la Policía de la Provincia, con el fin de detectar los vehículos que ingresan a nuestra provincia con pedidos de secuestros por diversos hechos.

El procedimiento se llevó a cabo en calle Santiago Herrera al 200, del barrio Juan Felipe Ibarra. Los efectivos realizaron un recorrido por el mencionado complejo habitacional, cuando detectaron un automóvil Volkswagen, modelo 346 Touareg 4.2, dominio IIB-081, que estaba estacionado en el sitio.

Con el número de la chapa patente del vehículo, los efectivos realizaron las consultas correspondientes al sistema de la Planta Verificado, por lo que arrojó como resultado un pedido de secuestro dispuesto por la Policía Federal en vigencia desde el 2 de noviembre de 2017.

Ante la situación, los peritos de la División Sustracciones procedieron a verificar el número de motor, sobre el que también había una orden de secuestro.

De inmediato se dio intervención al representante del Ministerio Público Fiscal por la Circunscripción Capital, quien ordenó que el rodado sea secuestrado de inmediato y depositado en sede policial, ubicada en el predio de la ex Fandet.

 

Pericias

Por disposición judicial, los peritos de la División Sustracciones de Automotores realizaron las pericias de rigor en el rodado con el fin lograr localizar otras anomalías en el rodado secuestrado.

La Policía, además, trata de determinar las circunstancias en que se produjo el robo del rodado.

Por otro lado, se conoció que el vehículo había sido dejado en un taller mecánico por su actual propietario —que habría adquirido el rodado de buena fe— para que le realizaran una revisión mecánica, ya que habría estado teniendo algunos problemas con el funcionamiento del vehículo, revelaron fuentes policiales.

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