“Apenas escuches este audio, vení a ver a tu hijo. Mi hija le pegó y está mal”, fue el mensaje que un ama de casa recibió de su consuegra. El menor había sido agredido físicamente por una adolescente, con quien terminó recientemente la relación amorosa que los unía.
El hecho fue denunciado por una mujer de 52 años en la sede de la Comisaría Comunitaria 33 de Sumampa –departamento Quebrachos- y comenzó a ser instruido por la Unidad Fiscal de la circunscripción Capital.
Según indicó la mujer, residente en el paraje San Mateo –departamento Quebrachos-, días atrás, se encontraba en su vivienda cuando sonó su celular. Era un mensaje de WhatsApp de su consuegra. Era un audio, lo escuchó y de inmediato recurrió a la Policía en busca de ayuda para evitar una tragedia.
A través de un mensaje de voz, la madre de su nuera le pedía que “fuera a buscar a su hijo, que minutos antes había sido agredido físicamente por su hija”. Le advertía que estaba muy lesionado, por lo que pretendía evitar eventuales futuros incidentes entre las familias; por una posible tragedia que pudiera suscitarse.
De inmediato, ante los uniformados, la mujer reveló que “no era la primera vez que su hijo era lesionado por su novia”. Al tiempo que advirtió que “había hablado con la jovencita –también de 17 años-, a quien le había manifestado que si continuaba agrediendo al menor la denunciaría”.
Mientras los efectivos estaban tomando la denuncia penal a la madre del damnificado, se hicieron presentes en la sede policial el jovencito junto a su hermano, quien se había dirigido a la casa de la novia del menor para buscarlo. El mismo presentaba arañazos en los brazos y golpes de puño.
Al entrevistarse con los efectivos, el menor indicó que “su exsuegra había exagerado en el audio que le envió a su madre”. Tratando de minimizar el ataque que había sufrido. Al tiempo que aseguró que la adolescente había reaccionado de manera agresiva, luego de que mantuvieran una charla y le indicara que “no quería seguir la relación amorosa que los unía”.
La Fiscalía ordenó una serie de medidas judiciales a seguir las próximas horas, mientras ordenó exámenes médicos a la víctima y entrevistas psicológicas.
En tanto, se ordenó que las partes sean notificadas de una prohibición de acercamiento e impedimento de contacto por cualquier vía de comunicación.
Los “guardianes del orden” realizarán un informe socio-ambiental y un relevamiento vecinal en el domicilio donde se produjo el hecho. A la vez, se comenzó a tomar declaraciones testimoniales tanto a la madre de la agresora como a los demás testigos que presenciaron el violento ataque que sufrió el adolescente.
