El fantasma de una nena aparentemente ha sido capturado después de pasar 200 años caminando alrededor de su propio monumento. La niña sin nombre es supuestamente uno de los 26 niños que murieron cuando el pozo de la mina Huskar Pit cerca de Silkstone, South Yorkshire, Inglaterra, se inundó en 1838.
Cuando Linzi y Lee Street fueron al popular lugar de caza de fantasmas, comenzaron una transmisión en vivo de su exploración del área. Y cuando llegaron a casa, vieron lo grabado y se dieron cuenta de que en realidad lograron capturar el fantasma de uno de los niños muertos.
Las escalofriantes imágenes del monumento muestran una aparición aún blanca frente al tronco de un árbol antes de que Lee, de 37 años, se aleje sin darse cuenta.
Quién era realmente la niña vestida de blancoLinzi, de 54 años, afirma que la figura es una niña con un vestido blanco y está "100%" segura de que es un espíritu, a pesar de no verlo en ese momento. Se cree que los niños muertos fueron recuperados del lugar del accidente, lavados y luego vestidos de blanco y Linzi dice que es por eso que el "espíritu" lleva un vestido blanco.
Segura de su postura, la cazadora de fantasmas a tiempo completo dijo que las imágenes "desgarradoras" son tan sorprendentes que no hay dudas de que son verdaderas. Si fuesen falsas, no hubieran sido filmadas en su transmisión en directo.
"Parece una niña pequeña parada allí, he capturado un espíritu de la vida real aquí. Tiene un pequeño vestido blanco y puedo ver una carita, una boca y dos ojos. Está elevada del suelo y tiene los pies descalzos. Es realmente interesante porque creo que está cerca del hoyo de día donde los niños tristemente se ahogaron", dijo.
La cazadora de fantamas dice que la pareja recogió lecturas "interesantes" del campo electromagnético en su dispositivo de caza de fantasmas cuando hicieron preguntas para tentar a los espíritus en el área a comunicarse.
La figura conmemorativa de Huskar Pit, que incluye la estatua de un niño minero que se arrastra desde un agujero, fue encargada por los residentes locales en 1988 para conmemorar el 160 aniversario del desastre. La mujer dice que siempre se siente emocionada cuando visita el pozo, que está a solo 10 minutos en coche de su casa.
