En las últimas horas, una mujer acabó siendo noticia, luego de publicar una foto con la cuenta de un restaurante del balneario bonaerense de Pinamar, donde le cobraron $7.300 por un desayuno para dos personas.
En el posteo, que eliminó posteriormente de la red social Twitter, la usuaria manifestó su descontento por el importe total que resultó del pedido de dos huevos revueltos, un extra-palta, un adicional, dos cafés grandes y dos adicionales de leche de almendras, que ella pidió para sí misma y para un acompañante.
Aunque luego se arrepintió de expresar su parecer en Twitter, la cuenta @nanainseul publicó: "De oro, los huevos. Lugares que no volvés, comenzando ya", denotando su fastidio. Sus palabras se viralizaron y muchos usuarios de la red social del pajarito se atrevieron a responderle, reaccionando contra la actitud de la mujer.
El ticket de la discordia. El total era de $7.300.
Sorprendentemente, las personas que alcanzaron a ver sus quejas señalaron como incorrecta su actitud: "Si viste los precios y te pareció caro, ¿para qué te quedaste?", cuestionó una internauta.
Esto dio lugar a otros comentarios negativos: "Yo, cuando pido la carta, si los precios son un exceso, me levanto y me voy. ¿Cuál es el problema?"; "Depende de dónde vayas, Nana. Estamos en Pinamar Norte con unos amigos. Merendamos 6 personas súper abundante y bien, con 6 mil pesos".
Por supuesto, muchos de ellos destacaron que, a menudo, este tipo de situaciones tienen lugar en espacios turísticos conocidos por ser costosos o demasiado populares.
