Un relevamiento realizado a más de 1.200 empresas durante la primera quincena de mayo ha revelado un panorama preocupante para la economía industrial del país. La mayoría de las empresas reportaron caídas en la producción, ventas, exportaciones y empleo. En este contexto, se ha incrementado el número de empresas con dificultades para cumplir con sus pagos.
El mismo fue presentado hoy por la Unión Industrial Argentina y muestra los desafíos que tiene el sector en el país.
El Monitor de Desempeño Industrial (MDI), que adelanta el ciclo de actividad industrial, se ubicó en 35,5 puntos, muy por debajo del umbral de 50 que indica expansión, marcando así su octava caída consecutiva. Este valor representa una disminución de 4,9 puntos porcentuales en comparación con el mismo mes del año pasado. El indicador MDI anticipa una contracción de la actividad industrial al ponderar resultados de producción, empleo, tiempos de entrega y stock de insumos, todos ellos mostrando tendencias contractivas.
Mientras las promesas electorales de Javier Milei sobre que la "casta" política iba a ser la que "pagara" el ajuste económico siguen sin cumplirse, la sociedad, con salarios en baja, alto índice de desempleo y pobreza y retracción del consumo; y las empresas con caída en su producción; menores ventas e ingresos, parecen haberse convertido en las variables del ajuste.
Por caso, en lo que va del año predominan compañías con caídas en la producción, ventas, exportaciones y el empleo y hasta con dificultades para hacer frente a sus pagos.
Las principales preocupaciones de las empresas son el aumento de costos, mencionado por el 30,2%, seguido de la caída de la demanda de otros sectores (25,1%) y de la demanda de los hogares (23,3%). Además, el 60% de las empresas reportó caídas en las ventas al mercado interno, comparado con el 50% en octubre de 2023, y el 24% de las empresas experimentó caídas en el nivel de empleo, el valor más alto de la serie.
Más de la mitad de las empresas encuestadas (55%) presentaron dificultades para afrontar al menos uno de los siguientes pagos: salarios, proveedores, compromisos financieros, tarifas de servicios públicos e impuestos. Estos resultados subrayan la urgente necesidad de políticas de apoyo y estímulo para la industria, con el fin de revertir estas tendecias negativas y promover una recuperación económica sostenible.
Costos preocupantes
Del relevamiento del CEU se puede concluir que el incremento de los costos fue la principal preocupación para el 30,2% de las empresas. También surgió preocupación por la caída de la demanda de otros sectores (25,1% de las empresas) y por una menor demanda de hogares (23,3%).
Además, el 53% de las empresas mostró caídas con relación al 35% de abril de 2023; solo el 12% tuvo subas, el segundo nivel más bajo de la serie; la merma predominó en los 13 sectores industriales relevados y el índice de difusión (% con suba, menos % con bajas) fue negativo en -41,0 p.p, por séptima vez consecutiva.
Mercado interno recesivo
Otro dato que demuestra la parálisis de la economía durante los primeros meses de la gestión del presidente Javier Milei es que el 60% de las empresas manifestó haber sufrido caídas de las ventas al mercado interno, en comparación al 50% en octubre 2023.
Además, el porcentaje de empresas que tuvo caída de las exportaciones (37%) fue menor que el del mercado interno. Los sectores más afectados por las bajas en las exportaciones fueron Automotor, Confecciones, Cuero y Calzado, Edición e impresión y Metales comunes.
Empleo en caída
En el total de las empresas relevadas, el 24% admitió caídas en el nivel de empleo, el valor más alto de la serie teniendo en cuenta además que por tercer relevamiento consecutivo, son más las empresas que reducen su nivel de empleo que aquellas que lo aumentan.
En este sentido, el índice de difusión se ubicó en -18.4 p.p., el nivel más bajo de la serie, aunque además de reducción de personal, las empresas aplicaron suspensiones y redujeron turnos.
Otro de los datos que impacta de la encuesta del CEU es que el 55% de las empresas encuestadas presentó dificultades para afrontar al menos uno de los siguientes pagos: salarios, proveedores, compromisos financieros, tarifa de servicios públicos, impuestos.
Es el segundo relevamiento con un atraso mayor al promedio de la serie a lo cual se suma que creció el porcentaje de empresas con dificultades para hacer frente a todos los pagos: 12% vs 7% en enero, con dificultades que fueron mayores en el pago de impuestos y proveedores.
Pequeñas empresas, más afectadas
En el caso de las PyMEs, el 53% de las empresas presentaron problemas en algún pago, y el 8% en todos.
En cuanto a los tiempos de entrega, predominan las que indicaron que disminuyeron (20,1%).
Solo el 12,1% afirmó que los tiempos de entrega aumentaron, lo que muestra un significativo cambio en comparación a abril del 2023 (38,2%).
El 45% dio cuenta de que su stock de materias primas e insumos se redujo; el 12,4% indicó que aumentó, variable que se ubica entre los niveles más bajos de la serie.
En este marco, las PyMEs también registraron un menor dinamismo con un 54% que registró una baja en la producción, mientras que solo el 11% manifestó subas.
Esta misma predominancia de las empresas con caídas se observó en las ventas tanto al mercado interno, como externo, escenario en donde los sectores más afectados fueron Confecciones, cuero y calzado; Metales comunes; Minerales no metálicos y Papel, cartón y madera.