La Justicia iniciará esta semana el camino para definir si reabre las causas por la firma del Memorándum con Irán y Hotesur y Los Sauces, que tienen a Cristina Kirchner como acusada. La Cámara de Casación citó a una audiencia este martes y a otra el jueves para escuchar argumentos a favor y en contra del sobreseimiento de la vicepresidenta.
Los jueces que convocaron a las partes son Diego Barroetaveña, Daniel Petrone y Ana María Figueroa. Desde el momento en que finalicen estas audiencias -lo que se prevé para fines de noviembre- tendrán 20 días hábiles para decidir si mandan a realizar el juicio oral y público o se dejan firmes los sobreseimientos.
No existen pistas firmes sobre la definición que asumirá la Casación, aunque la especulación que tomó fuerza en los tribunales en los últimos meses es que el tribunal confirmaría el sobreseimiento de Cristina Kirchner en el caso de Memorándum con Irán, mientras que revocaría esa situación en la causa Hotesur y Los Sauces, donde también están acusados Máximo y Florencia Kirchner, ordenando realizar el juicio oral y público. Solo presunciones por el momento.
La Sala I de la Cámara de Casación comenzará este martes a las 10.30 con las audiencias por la causa de la firma del pacto con Irán. La vicepresidenta estaba acusada de encubrimiento a los sospechosos iraníes del atentado a la AMIA en un expediente que se inició por la denuncia del fiscal Alberto Nisman en 2015, que cuatro días más tarde fue encontrado muerto en su departamento.
El tribunal oral integrado por los jueces José Michilini, Gabriela López Iñiguez y Daniel Obligado no encontró delito en la firma del Memorándum con Irán, al entender que se trataba de un acto de gobierno, ratificado por el Congreso. Además, algunos de los magistrados lo enmarcaron en una política de persecución contra el kirchnerismo por parte del gobierno de Cambiemos.
El fiscal Marcelo Colombo apeló ese fallo y el asunto llegó a la Cámara de Casación, donde el fiscal ante ese tribunal, Javier de Luca, no mantuvo el recurso de apelación, tras señalar que no puede haber delito en la firma de un tratado internacional aprobado por el Congreso.
No obstante, la apelación prosperó sin acusadores públicos, ya que quedaron los acusadores privados, representados por familiares de víctimas del atentado a la AMIA. Son Mario Aberbuj y Luis Dobniewski, representados por los abogados Juan José Ávila y Tomás Farini Duggan. Mañana argumentará Ávila ante el tribunal, en favor de que el caso se reabra y se haga el juicio oral, y hablará también Aberbuj. La DAIA, que también es querellante, tiene por abogado a Gabriel Camisier.
Está previsto que este martes también expongan los argumentos para mantener cerrado el caso el abogado de Carlos Zannini, Mariano Fragueiro Frías; el letrado Martín Arias Dubal, que patrocina al actual embajador argentino en Rusia y exviceministro de Relaciones Exteriores Eduardo Zuain -que también quiere expresarse en la audiencia- y Marcelo Aldazábal, defensor del viceministro de Justicia, Juan Martín Mena.
El fiscal De Luca, a pesar de no sostener el recurso, pidió hablar para explicar sus motivos. La audiencia de mañana se continuará el 24 de noviembre.
El abogado de Cristina Kirchner, Alberto Beraldi, anticipó que no va a hablar sino que presentará un escrito con sus argumentos. Lo mismo dijo el abogado Fernando Burlando, defensor de Fernando Esteche, exlíder de Quebracho.
Argumentarán oralmente el abogado Adrián Albor, por la defensa de Luis D’Elía, que también quiere hacer uso de la palabra, y las abogadas Lucila Larrandart y Graciana Peñafort, actual directora de Asuntos Jurídicos del Senado.
Cuatro días antes de aparecer muerto en su departamento de Puerto Madero, el fiscal Nisman denunció que la firma del pacto con Irán persiguió la intención de favorecer a los iraníes y libaneses con pedido de captura internacional como sospechosos de planificar y ordenar el atentado contra la AMIA.
La Justicia en principio desestimó esta denuncia, luego se reabrió el caso y terminó con el procesamiento de Cristina Kirchner, Zannini, Mena y otros acusados. El caso no llegó a juicio y la vicepresidenta fue sobreseída. Ahora se revisará es decisión, para confirmarla o revocarla, y mandar a hacer el juicio oral.