En un partido emotivo, con muchas imprecisiones, Central Córdoba y Lanús empataron 2 a 2, en el encuentro que dio inicio a la 16ª fecha de la Liga Profesional.
Alejandro Martínez y Renzo López marcaron los goles del “Ferro”, en tanto que José Sand, de tiro penal, y Brian Blando, anotaron para el “Granate”.
A priori, sumar de a tres era una obligación para el local, pero tras el trámite de partido, dio la sensación de que ganó un punto y no que perdió dos.
El partidoLos primeros veinte minutos de juego fueron muy buenos de Central, presionado, asfixiando a su rival y encontrando sociedades de mitad de la cancha en adelante. Los zurdos López Muñoz y Martínez se juntaban a tocar y era difícil sacársela al local.
No extrañó que a los 10 minutos, López Muñoz sea detenido con falta en la puerta del área y que Martínez, de tiro libre, clavara el balón en el ángulo de Monetti. Golazo de Central, que hasta ese momento era el que mejor insinuaba.
De los 10 a los 20, siguió el dominio local, hasta muy cerca del área rival. Parecía que el “Ferro” podía encontrar rápido el segundo, pero le faltó punch en los metros finales.
Después de los 20, el “Granate” empezó a manejar la pelota, comenzó a quitarle protagonismo al local y cuando nada hacía prever nada (35m.), tras una pelota que cayó en el vértice del área chica, Rigamonti salió "regalado" y mal ante Blando y le cometió un claro penal. El interminable “Pepe” Sand lo cambió por gol con un remate bajo y esquinado.
El empate golpeó duro al “Ferro”, porque hasta ese momento había sido el más ambicioso. Y ocho minutos después, en una pelota quieta frontal, Blando le ganó a su marcador y de cabeza la puso al lado del segundo palo de Rigamonti. Sorpresa y media. Lanús, con dos llegadas (100% de efectividad), le había dado el partido al “Ferro”.
Siempre se dice que el fútbol son estados de ánimo. Lanús lo aprovechó en el primer tiempo.
Central salió con otro ímpetu a jugar el ST. Sobre los 8, Boggio, de tiro libre, hizo estrellar el balón en el travesaño. Hubiese sido el 3-1 para la visita. Y dos minutos después, tras un tiro de esquina, la bajó Enzo Kalinski (ingresó por Soraire) y tras una serie de rebotes, Renzo López, de cabeza, estableció el 2-2.
Después del empate, el partido se abrió. Los dos salieron dispuestos a ganarlo. Lo tuvo Renzo López con un cabezazo que salió cerca. Sobre los 40 lo tuvo Claudio Spinelli (ingresó por Blando), pero selo negó Rigamonti. Sobre el final, Lanús llenó de centros el área del “Ferro”, que la pasó mal, sobre todo por el flojo partido de sus centrales, que dejaron cabecear todo lo que vino por el aire.
Al final, quedó la sensación de que Central ganó un punto y no que perdió dos.
