Huracán, en curso ascendente, y San Lorenzo, sumergido en su crisis institucional y deportiva, animarán hoy el siempre pasional clásico porteño, previsto en el barrio de Parque de los Patricios por la 18ª fecha. La cita en el Palacio Tomás Adolfo Ducó está fijada a las 18 con arbitraje de Fernando Echenique y transmisión de Fox Sports Premium y TNT Sports.
“El clásico es un partido aparte”, reza un viejo axioma del fútbol con el propósito de desligar favoritismos en ese tipo de cruces, que representan una final en sí misma. Concedida esa idea, la evidencia demuestra en esta ocasión que Huracán tiene un escenario más favorable para festejar.
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El “globo” de Frank Kudelka atraviesa su mejor momento en el campeonato (cuatro victorias en los últimos cinco partidos), tiene la confianza en alza, goza de buenos rendimientos individuales y contará con el respaldo de un público ávido por asestarle a un golpe letal a su máximo adversario.
San Lorenzo es la contracara y como ejemplo solo alcanza con apuntar que llegará al Ducó con un interinato en el banco de suplentes tras la salida del uruguayo Paolo Montero, quien dirigió las 17 fechas precedentes con bajísima efectividad del 33% (4 triunfos, 5 empates y 8 derrotas). El equipo estará a cargo de la dupla compuesta por el “Camello” José Daniel Di Leo, miembro del cuerpo técnico de Edgardo Bauza que le dio al club la única Copa Libertadores de su historia (2014), y Diego Monárriz (DT de la Reserva), de conocida experiencia en la tarea de apagar incendios en Boedo. Con apenas tres prácticas, el binomio técnico de emergencia decidió terminar en la línea defensiva de cinco que caracterizó el pálido ciclo de Montero y devolverle la confianza al chico Julián Palacios (22 años), que recuperará un lugar en la mitad de la cancha como ladero del veterano Néstor Ortigoza (37). San Lorenzo deberá improvisar a Gino Peruzzi como lateral izquierdo por la expulsión de Nicolás Fernández Mercau, su mejor jugador actual, en la derrota con Lanús (1-3) el pasado miércoles en el Nuevo Gasómetro.
Por último, regresará al once inicial el cuestionado goleador Franco Di Santo, quien aportó solo dos tantos con el uruguayo en la banca.
Huracán también tendrá una baja sensible, la del marcador central Lucas Merolla, su baluarte en la última línea, víctima de una fractura en el tercio medio de la tibia izquierda durante la reciente goleada sobre Banfield (4-1). Kuldelka dispondrá además la vuelta de jugadores que decidió preservar en el Florencio Sola de cara al clásico: el defensor Ismael Quilez, los mediocampistas Vera y Cristaldo, y el goleador uruguayo Matías Cóccaro. Dejarán su lugar Raúl Lozano, Santiago Hezze, Acevedo y Triverio.