Luego de que una comerciante añatuyense descubriera que su yerno le había sustraído $ 152 millones, se generaron rápidos procedimientos la noche del miércoles 16 de abril. La Justicia no solo ordenó que el joven Sergio Villarreal Miranda (22) y sus padres, Sergio José Villarreal (52) y Alejandra Miranda (47), quedaran apresados, sino que también libró órdenes de allanamiento.

En la casa en la que el joven convivía con la hija de la damnificada, en el barrio Polo Norte, secuestraron tres motos que habrían sido compradas con el dinero sustraído. En uno de los baúles, había casi $ 7 millones, entre pesos y dólares. En tanto, en la vivienda de los padres del sospechoso, secuestraron una camioneta adquirida en Córdoba y una factura de $ 3 millones por la compra de materiales de construcción, realizada en La Banda y pagada en efectivo.

Sin embargo, en la vivienda allanada no había ni un ladrillo.

Personal policial de la Comisaría N° 41 profundizó averiguaciones bajo la dirección del fiscal Guillermo Farías y descubrió que hay una obra en construcción en un terreno de calle Juan José Paso del barrio El Triángulo.

El supuesto dueño de la propiedad sería el policía en situación de retiro obligatorio Sergio José Villarreal. Incluso, les habría enviado un mensaje desde el calabozo a los albañiles para que suspendieran las tareas porque estaba detenido. Desde aquel momento, los trabajadores habrían quedado sin cobrar.

Los investigadores determinaron que ya se habían construido habitaciones, lo que hace sospechar que estaban edificando una casa de fin de semana o un complejo de alquileres.

La causa se instruye como hurto simple, hurto agravado, tenencia de arma de fuego de uso civil en perjuicio de María Teresa Coronel, Agostina López Coronel y Corralón San Agustín.