A pesar de la gran expectativa abierta ayer con la aprobación del pedido de informes e interpelación al intendente de La Banda, Roger Nediani, por la gravedad institucional que representa la cuestión salarial de los empleados municipales bandeños y el estado de las cuentas de la comuna, Roger Nediani no se presentó en el Concejo Deliberante a rendir cuentas de lo solicitado por los 10 concejales presentes en la sesión y, en su lugar, envió a la secretaria de Gobierno e interina de Economía, Victoria Torres, y los contadores Javier Salomón y Gabriel Ruiz.
De la reunión, que se realiza a puertas cerradas y de la que fue expulsado —literalmente— el equipo periodístico de Nuevo Diario por el secretario de Comisiones, Marcos Layús, y Marisa Sepúlveda, secretaria del presidente del cuerpo, Gabriel Santillán, participan todos los concejales del Frente Cívico, del bloque del Frente Renovador y de Libres del Sur. Una vez más pegaron el faltazo los concejales chabaístas Leslye Anahí Campos (esposa del exintendente bandeño) y Rubén Vizgarra. Aunque se informó que hora y media después, arribó Campos al Deliberante ya avanzada la reunión.
A pesar de la vocería de oficio ejercida ayer por el concejal Miguel Ángel "El Nija" Montenegro, que avisó que Nediani no concurriría al recinto; quien tiene una cercanía familiar afectiva con el primer mandatario municipal, como es de público conocimiento, no pudo argumentar con solidez en el recinto las cuestiones planteadas por sus pares y que hacen a la preocupación de los empleados del municipio.
Con la oposición de los gremios que representan a los trabajadores, quienes no aceptan un aumento del 30% en negro sobre el básico y ningún anuncio para quienes trabajan en planes que representan el grueso de la plantilla municipal, Nediani hasta el día de la fecha no dio la cara en persona, sino a través de su directora de Prensa, Fernanda Raschi, y de sus funcionarios.
Capítulo aparte merece el ocultismo procurado por el presidente del cuerpo, Gabriel Santillán, al enviar a su secretario de Comisiones, Marcos Layús, y su secretaria Sepúlveda a entorpecer el trabajo periodístico de Nuevo Diario, único medio de comunicación presente en el recinto de comisiones.