Es muy frecuente encontrar en la vía pública carteles de búsqueda de mascotas perdidas, e incluso otros de animalitos encontrados en la calle, que buscan a su familia. Pero estos carteles llamaron la atención de todos, porque dejaron entrever la situación sentimental de una pareja a través de su perrito perdido.
Porque su dueña no estaba segura de que su mascota se hubiera extraviado: tenía la sospecha de que su ex se lo había llevado sin su consentimiento. Por eso cuando descubrió que su perrito ya no estaba, colocó en los árboles y paredes de su barrio un particular cartel de búsqueda.
Primero comienza como un aviso normal, explicando las características de perrito perdido: se llama Vega, es bueno, y hay una foto para reconocerlo. Pero luego explica: “Posiblemente esté desorientado, eso en caso de que no se lo haya llevado mi ex, lo cual no tengo pruebas”.
Entonces agrega, en mayúsculas y subrayado: “Por favor, si veis un perrito así con un chico de unos 27 años, estatura mediana y moreno, llamadme urgentemente. Es mi ex y se lo habrá llevado sin mi consentimiento”.
Los vecinos de la zona quedaron sorprendidos con este cartel, pero mucho más aún cuando, unos días después, apareció al lado de cada uno de los volantes, otro similar que decía “No se busca”.
Su ex novio, contrariado por la ruptura, se había llevado al perrito y le contestó con una foto del animal, dándole la espalda. El texto decía: “Teresa, el perro también era mío y tengo derecho a estar con él. Tú me pusiste los cuernos y me engañaste en la cara. Espero que tengas muchas fotos suyas porque no lo vas a volver a ver. Para de buscarlo y alarmar a la gente. Alberto”.
No se supo luego qué pasó con la pareja, ni con el perrito perdido (o mejor dicho secuestrado). Sólo se sabe que Alberto se aseguró de que Teresa pasara vergüenza públicamente con la respuesta a su cartelito de búsqueda, publica La100Radios.com.
