Todas las expectativas de los argentinos están puestas en esta segunda mitad del año, cuando según palabras de la campaña proselitista de Cambiemos iban a llegar las inversiones y el país comenzaría a salir del “pozo” inflacionario. En este sentido, el economista Federico Scrimini habló con Nuevo Diario y no tuvo buenas consideraciones para el tan mentado “segundo semestre”.
Según sus palabras, estamos atravesando un proceso de “enfriamiento de la economía”, que conlleva un círculo vicioso dólar-inflación-alta tasa de interés-fuga de capitales, en lo que él denomina “telaraña dinámica”, donde “vienen los capitales para jugar con la tasa —eso es lo que se llama la bicicleta financiera— y luego de que ganan con la tasa, que es la más alta del mundo, los vuelven a sacar”.
“Argentina, con el Gobierno de Cambiemos, levantó todos los controles a la importación, los impuestos, sacó el control de cambios, el famoso mal llamado ‘cepo’. Nos vamos a empezar a acordar de que esto no era un cepo sino un control para que no se dispare el dólar”, anticipó Scrimini.
Ahondando los conceptos sobre el enfriamiento de la economía, indicó: “Cuando uno levanta la barrera de la importación, todos esos países que no saben dónde meter la sobreproducción encuentran un país que abre sus fronteras, introducen lo más que puedan ahí, y eso es lo que está haciendo la Argentina”, en detrimento de la economía interna.
A modo de graficar esta situación, Scrimini señaló: “Los juguetes que se hacían aquí dejaron de fabricarse porque no hay quien pueda competir con los costos de un juguete de Brasil. Aparte de eso se sacó la retención a la exportación, y lo que iba a ser una solución para las economías regionales fue un boomerang de muy corto avance. No hubo un beneficio y, lejos de eso, hoy las economías regionales están peor que en 2015, y mucho peor que en el promedio de los últimos 12 años”.
“Esto enfría la economía porque deja a las personas de todas esas actividades sin trabajo. Aparte de eso, no se produce y no consumen, y entonces lo que ocurre es el enfriamiento. Se calcula que van despedidos cerca de 300 mil trabajadores. En vez de haber inversión hay desinversión, hay negocios que cierran. Hay despidos y hay eslabones de las cadenas productivas de las más diversas que se empiezan a romper. Cuando se rompe la cadena de pago o desaparece un comercio, desaparece un fabricante, lo que pasa con esa cadena es que se rompe entera”, indicó Scrimini al referirse al segundo semestre.
“La inflación hasta ahora es del 43%”
“Lo que se esperaba para este segundo semestre es la reactivación de la economía, baja de inflación e inversiones, lluvia de dólares para inversiones, producción y consumo”, indicó Scrimini y agregó que en contraposición, “lo que está ocurriendo es que la inflación tuvo un salto inesperado por parte del Gobierno, que opinaba en la figura del ministro de Hacienda que cuando devaluaran no iba a traducirse en inflación porque toda la economía de los negocios tenían en la cabeza el dólar paralelo, en negro, y no el oficial de $ 9,70”.
“Eso no ocurrió.
Evidentemente el salto de la inflación a casi el 7% mensual en el peor de los casos lo desmiente, porque evidentemente la economía no funcionaba en base al dólar paralelo”, recordó. “Hoy tienen que reconocer que la inflación que ellos decían que iba a ser del 25% (siendo que el último año fue cerca del 20%) va a ser muy lejos de la predicción del ministro, cerca de un 43% hasta ahora”, remarcó el economista, al dar su punto de vista sobre la situación.
