Este domingo 16 se encontró en la carretera Damasco-Suwayda el cuerpo sin vida Abu Ali Laham, Comandante de Inteligencia de la Fuerza Aerea pro-Assad.
Mientras, el Presidente sigue desaparecido. El avión en el que se habría trasladado despareció del radar después de descender más de 2,5 kilómetros sobre la ciudad de Homs.
El ataque que mató el lunes a 14 personas, incluidos siete miembros de la Guardia Revolucionaria en Damasco, amenaza con elevar la tensión en Medio Oriente.
Canadá y Países Bajos llevaron al Gobierno sirio ante el máximo tribunal de Naciones Unidas y acusaron a Damasco de violaciones masivas de los derechos humanos contra su propio pueblo. Bashar al Assad ya había desestimado este caso, calificando las acusaciones de "desinformación y mentiras".
Los grupos nacionalistas, supremacistas y neofascistas de Europa y Estados Unidos encontraron un nuevo ídolo: el hombre que gobierna con mano de hierro desde Damasco y provocó enormes masacres en los 12 años de guerra civil dentro de su país.
Arabia Saudita y Siria anunciaron hoy que repondrán sus respectivas representaciones diplomáticas tras 11 años de ruptura entre Riad y Damasco, aislado en medio de la guerra civil que vive Siria, y apenas días después del anuncio de su regreso a la Liga Árabe.
A la cifra oficial de decesos se suman los fallecidos en el noroeste de Siria, que se estima son entre 4.000 y 4.400. Turquía suspendió las operaciones de rescate, excepto en las dos provincias más afectadas.
Una ONG siria opositora dijo que el ataque es el "más mortifero" contra el país. El gobierno de Israel no realizó comentarios pero según trascendió, apuntaron a sitios supuestamente "utilizados por las milicias iraníes y el Hezbollah libanés".
Una explosión hirió a cuatro militares estadounidenses durante una incursión que acabó con la vida de un alto dirigente del grupo Estado Islámico (EI).
A casi 250 horas del devastador sismo, los socorristas turcos hallaron a una adolescente entre los ruinas de un edificio derrumbado. Continua a búsqueda de sobrevivientes.
"Nos emociona poder compartir esta noticia, a nueve días de uno de los desastres más grandes de la historia de la región", dijo el canciller Santiago Cafiero. La brigada USAR, que fue enviada desde la Argentina a Turquía el pasado 9 de febrero, está integrada por 28 efectivos altamente calificados.
A casi una semana del hecho, decenas de miles de socorristas trabajan entre las ruinas en busca de señales de vida, donde según el jefe humanitario de la ONU, "el saldo de víctimas se va a duplicar o más".
En medio del frío y la desolación, los socorristas, auxiliados por los primeros equipos de emergencia llegados de otros países, luchan contra el reloj para encontrar personas con vida tras el terremoto de magnitud 7,8 del lunes pasado.
En medio del frío y la devastación, los socorristas, auxiliados por los primeros equipos de emergencia llegados de otros países, luchan contra el reloj para encontrar personas con vida tras el terremoto de magnitud 7,8 del lunes a las 4.17 (23.17 del domingo en Argentina), con epicentro en el sureste de Turquía.
El temblor que se sintió a las 4.17 de este martes (23.13 del lunes hora argentina) provocó que más de mil edificios se derrumbaran totalmente, lo que hace prever una balance mucho más grave, dado que la mayoría de la gente estaba durmiendo en sus casas.
