
Las integrantes de Un Pelito de Esperanza, el banco solidario de pelucas para pacientes oncológicas, cuenta con una nueva sede, la cual está ubicada en calle Pedro León Gallo 1297, esquina Antártida Argentina, de la ciudad Capital.
El dato no es menor: hace un par de meses se vieron en el apuro de encontrar un nuevo espacio físico para poder continuar con sus trabajos (llevan entregadas más de 800 pelucas en los últimos siete años).
Alicia Roldán, presidenta de Un Pelito de Esperanza, contó al equipo de Nuevo Diario que se trata de un espacio cedido en comodato, el cual cuenta con un salón pequeño, donde las peluqueras realizan la entrega de pelucas y, también, cortan el cabello a los donantes.
“La idea es darle a la persona la intimidad que necesita para reencontrarse con su nueva imagen y sentirse bien; elevar su autoestima en este proceso tan difícil de salud que le toca afrontar”, destacó.
La flamante sede también tiene un espacio donde se encuentran las máquinas de coser con las cuales confeccionan las pelucas. “Somos muchas las voluntarias que trabajamos dos veces por semana para sostener la producción de pelucas y para que siempre haya stock”, agregó la presidenta, quien adelantó que próximamente sumarán un salón para eventos especiales.
“Que nos hayan asignado este lugar da cuenta de que nuestro trabajo social es realmente indispensable y aporta al bienestar de muchas personas que deben pasar por un tratamiento oncológico, pero no tienen dinero para costear una peluca”, resaltó la entrevistada.
El equipo de Un Pelito de Esperanza se puso un nuevo objetivo: viajar al Encuentro Nacional de Bancos Solidarios de Villa María, Córdoba, en donde tienen proyectado aprender nuevas técnicas de costura, armado de cortinas y confección de pelucas en general.
El taller funciona los lunes a jueves, de 16 a 19. Quienes deseen donar su cabello pueden acercarse con su pelo ya cortado (el único requisito es que mida 30 cm en adelante). Para más información, contactarse al 385- 4202503.