Ubicada a 231 km por la ruta Nacional 64 y 157, a tres horas de Santiago, se encuentra Sierra Ancasti, un lugar que en plena primavera se viste de un manto blanco de nieve, ofreciendo un paisaje que parece sacado de un cuento de invierno.
Situada a una altitud por encima de los 1900 metros sobre el nivel del mar, Sierra Ancasti emerge como un destino encantador que ofrece la nieve. Sus picos nevados, sus bosques cubiertos de niebla y sus arroyos congelados crean una atmósfera mágica que invita a explorar y disfrutar de la naturaleza en su estado más puro.
Ancasti, como también la zona del camino a Guayamba se vio cubierta por un manto blanco por las bajas temperaturas de los últimos días. En este contexto los santiagueños aprovecharon la cercanía y se dirigieron a pasar la tarde en la zona. Al igual que Catamarca, varios puntos de Tucumán y las Sierras de Córdoba se vieron afectadas por este fenómeno climatológico, lo que también benefició a su turismo interno.
