Gustavo Carreras, doctor en Filosofía, llevó adelante el martes pasado la presentación de “Los libros sobre Mama Antula desde Santiago del Estero. Un panorama de la bibliografía santiagueña sobre la primera santa argentina”, en la 48ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.
El equipo de Nuevo Diario se contactó con Carreras, quien distinguió dos momentos “fuertes”: la beatificación (2016) y la canonización (2024) de María Antonia de Paz y Figueroa. “Estos dos eventos han suscitado numerosas publicaciones”, remarcó.
“Era una mujer sencilla que había vivido en una suerte de enclaustramiento de oración, meditación y asistencia a los pobres y a los jesuitas en sus retiros espirituales”, señaló el también presidente de la asociación civil Laudato Si’.
Vale remarcar que esta presentación fue realizada en el stand dispuesto por la Casa de Santiago del Estero, ante la presencia del gobernador Gerardo Zamora y demás autoridades provinciales.
“Comienza su obra evangelizadora en Santiago del Estero: recorre las campañas y las ciudades, y realiza ejercicios espirituales para hombres y mujeres. Fue muy novedoso que incorporara a mujeres y, también, a gente de diferentes clases sociales”, reconoció.
La presentación fue basada en las obras: “Mama Antula. La sierva de Dios”, de Alberto Bravo Zamora; “Beata Mama Antula”, del Gobierno de la Provincia de Santiago del Estero; “Mama Antula, mujer y ruin: fisuras en el orden social colonial del Río de la Plata”, de Alicia Guevel; “Antula. Una santa para nuestro tiempo”, de Mario Ramón Tenti; “Descalza: Mama Antula, la mujer que desafió los poderes máximos”, de Nunzia Locatelli, Cintia Suárez y Gisela García; y “Mama Antula. Una mujer empoderada en el Buenos Aires colonial”, de Nunzia Locatelli y Cintia Suárez.
“Apenas bajé del escenario se acercó bastante gente”, comentó el doctor en Filosofía y precisó: “El mensaje unánime ha sido que les ha parecido muy clara la exposición y que, por primera vez, escucharon hablar de Mama Antula, su significado y la repercusión que han tenido sus obras”.
Carreras hizo lugar a una anécdota: “Había un hombre que decía: ‘Soy ateo, pero me he emocionado cuando lo he escuchado hablar a usted porque he conocido cómo la maltrataban’. Hubo una muy buena repercusión”, rescató.
El entrevistado, por último, separó dos puntos al respecto de los libros que abordan a la primera santa argentina: su capacidad para tejer redes con diferentes autoridades y su postura como “mujer empoderada”. “Ella ha roto con los esquemas de lo que significaba ser una mujer en la época colonial, incluso hoy: la mujer siempre ha ocupado un lugar secundario con respecto al varón, un lugar desde donde no podía hablar y se le asignaban determinadas tareas. Ella tomó iniciativas propias y fue adelante”, enalteció.
