Ante la difícil situación que vive el país, debido al plan de gobierno que está llevando a cabo Javier Milei, agrupaciones y organizaciones sociales de Santiago del Estero convocaron a una movilización y marcha ayer por la mañana en contra de todo este “ajuste” que va en contra de los que menos tienen. Los principales perjudicados, los trabajadores y millones de familias en Argentina, que ahora deben atravesar momentos complejos para tratar de enfrentar sus “economías domésticas”.
En tal ocasión, marcharon agrupaciones como Polo Obrero, Libres del Sur, MTE (Movimiento de Trabajadores Excluidos), entre otros.
Al respecto, Sandra Gramiña de Barrios de Pie y la UTEP (Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular), dijo: “Este gobierno nacional se olvidó de los pobres, el presidente dijo que se iba a cortar un brazo si nos sacaba los subsidios. Bueno, estamos esperando que se corte el brazo como prometió. A la ministra Pettovello recordarle que en los comedores ya no tenemos pibes, en los comedores tenemos familias completas. Entonces, es un despropósito que nos haga esto. No queremos que se vaya contra el pueblo, queremos un pueblo feliz, sin violencia y sin tener que estar pidiendo”.
“No somos ni vagos ni planeros, somos laburantes como todos los demás. Somos trabajadores de la economía popular. Salimos a repudiar este feroz ataque, ya no sabemos a dónde irá todo esto”, remarcó Sandra.
Por otra parte, María Rita “Maru” Díaz del FOL (Frente de Organizaciones en Lucha), indicó: “Nuestro objetivo es hacer saber al Gobierno nacional que nos mantenemos organizados, porque nos están ‘criminalizando’ a las organizaciones y agrupaciones sociales. Y no somos ningunos criminales, somos todos trabajadores. Nuestra lucha es por todos los compañeros que en estos momentos trabajan de manera precarizada. Porque a nivel nacional somos 1.200.000 de trabajadores precarizados y queremos que el Gobierno nacional sepa que no estamos de acuerdo con sus medidas”. “Los ajustes que están implementando son de manera brutal y son un crimen para los pobres. Y sentimos que se están aferrando a señalarnos, pero nuestra lucha es organizada. Luchamos por nuestros merenderos, por nuestras familias, por nuestros trabajadores”, subrayó. “Con el paso del tiempo esto ha ido a peor, es un campo inflacionario tremendo y es terrible lo que estamos viviendo”, concluyó.
