En medio de un contexto económico desafiante y cambios regulatorios en el sector energético argentino, el Dr. Pedro Llorvandi, Secretario de Actas de la Confederación de Entidades de Comercio de Hidrocarburos y Afines (Cecha), ofreció su visión en el ciclo Actualidad Política de LV11.
Llorvandi compartió preocupaciones acerca de las facturas elevadas de servicios como la electricidad, destacando casos impactantes, como el de un establecimiento de fiambres que recibió una factura de más de un millón de pesos, así como un modesto kiosco que enfrentó un cargo de 800.000 pesos. Estas cifras, según Llorvandi, reflejan la complejidad y el desafío que enfrentan los comerciantes en medio de las fluctuaciones del mercado energético.
El secretario explicó el funcionamiento del sistema de energía contratada, señalando que, independientemente del consumo real, los comerciantes deben pagar una tarifa preestablecida. Esta dinámica, según Llorvandi, plantea desafíos adicionales para aquellos que intentan gestionar sus costos energéticos en momentos de poca actividad comercial o estacionalidad. En cuanto al diálogo con las autoridades nacionales, Llorvandi destacó que “existe un canal de comunicación directo con la Secretaría de Energía de la Nación”. Sin embargo, expresó preocupación constante sobre la falta de voluntad política para abordar las necesidades del sector comercial en todas las administraciones gubernamentales recientes. Una de las cuestiones que generan incertidumbre en el sector es la posible venta de YPF, la principal empresa petrolera del país. Llorvandi señaló que, si bien la venta no necesariamente modificaría “las reglas del juego”, “es importante que la población entienda que una parte significativa de las acciones de la empresa ya está en manos extranjeras”, destacó.
Al abordar su experiencia personal como empresario del sector durante décadas, Llorvandi reconoció que los altibajos económicos son una realidad constante. Sin embargo, expresó su confianza en que cada presidente trabajará por el bien del país y, por ende, de los empresarios. Al mismo tiempo, abogó por la modernización del país, incluida una mayor flexibilidad laboral que permita a los comerciantes adaptarse mejor a las fluctuaciones estacionales de la demanda de empleo.
Una de las propuestas que destacó Llorvandi fue la implementación de una bolsa de trabajo temporal, similar a la que existe en otros sectores, que permita a los empresarios contratar personal adicional durante períodos de alta demanda, como la temporada turística en diferentes regiones.
