Un nuevo caso de abuso sexual sacude a la Iglesia Católica en Salta. El sacerdote Luis Alberto Sanjines fue condenado a tres años de prisión condicional por abusar de una niña de 11 años que participaba como monaguilla en la parroquia donde él ejercía funciones.
El hecho ocurrió en la Parroquia María Madre de la Iglesia, ubicada en el barrio Villa Primavera, aunque Sanjines también estuvo a cargo de la Iglesia San Pedro Apóstol. La denuncia fue radicada en 2022 y, tras la investigación, la Justicia halló al cura culpable, aunque no irá a prisión por tratarse de una pena en suspenso.
Tras conocerse la acusación, la Iglesia decidió removerlo de su cargo pastoral. Desde entonces, Sanjines se mantiene alejado del contacto público, evitando responder mensajes y bloqueando a quienes intentan comunicarse con él a través de redes sociales. Sin embargo, continúa publicando contenido religioso, incluidos mensajes e imágenes cristianas, lo que ha generado indignación entre fieles y organizaciones de protección a la infancia.
Este caso eleva a ocho el número de sacerdotes denunciados o condenados por abusos sexuales en Salta, lo que evidencia una preocupante continuidad de casos dentro de la estructura eclesiástica local. Colectivos de derechos humanos y asociaciones civiles exigen mayores controles por parte de la Iglesia y acompañamiento efectivo para las víctimas.
La comunidad de Villa Primavera, consternada por los hechos, reclama justicia y transparencia en un contexto donde la confianza en las instituciones religiosas se encuentra fuertemente cuestionada.
Artículo de QPS