En pleno Centro, un joven que vivie en situación de calle se arrimó a un carro-bar de Rivadavia y Absalón Rojas y pidió al cocinero que le hiciera algo de comer.
Le hizo una hamburguesa y se la entregó, pero cuando iba a sacar la gaseosa para entregársela, el sujeto aprovechó el descuido y tomó una bolsa de nailonen la que el comerciante tenía 190 mil pesos.
Notó lo que acababa de suceder y emprendió la persecución del ladrón, a la vez que daba aviso a la Policía, que finalmente logró atrapar al maleante a pocas cuadras.
Fue trasladado a la Comisaría 1ª, donde quedó alojado en calidad de aprehendido.