Empleados de un comercio de la zona céntrica se encontraban en plena tarea laboral, atendiendo a clientes. Entre ellos se encontraba una mujer que esperó pacientemente hasta que se atendió a la mayoría de los compradores y se acercó a uno de los empleados, quien evidentemente la conocía. Iniciaron una corta charla, aunque la mujer comenzó a elevar la voz. Le realizaba cuestionamientos sobre la aparente relación sentimental que estaban manteniendo. El hombre de 52 años trató de contener a la mujer para que no generara un escándalo en su lugar de trabajo, donde se desempeña hace bastantes años y tendría un buen concepto de los propietarios del negocio.
Sin embargo, el hombre casado no pudo controlarla. La mujer de 30 años elevó aún más la voz y comenzó con los insultos. De esta manera, se conoció que presuntamente el empleado de comercio no quería mantener más el vínculo que lo unía a ella. Las agresiones verbales continuaron, al igual que las amenazas, hasta que le pidieron que se retirara.
Tras el escándalo, el empleado -de un barrio de la zona norte- se trasladó hasta la Comisaría Comunitaria Nº 1, donde realizó la denuncia en contra de la mujer por el delito de amenazas. Durante su exposición ante los uniformados, el empleado de comercio reconoció que mantuvo una relación sentimental extramatrimonial con la acusada durante bastante tiempo.
Los detalles del hecho fueron informados a la Dra. Belkis Alderete, representante de la Unidad de Delitos Comunes Capital del Ministerio Público Fiscal, quien ordenó que se notificara a la sospechosa de 30 años de una prohibición de acercamiento y todo tipo de contacto telefónico y por redes sociales hacia el denunciante. Personal policial se presentó en el domicilio de la mujer, ubicado en el barrio General Paz, y le hizo saber de la disposición judicial.