En medio de incidentes protagonizados por familiares de los imputados, el tribunal integrado por los doctores Alfredo Daniel Pérez Gallardo, Graciela Viaña de Avendaño y Julio Carmelo Vidal, condenó ayer al “clan Iturre” por el homicidio de Daniel Gómez y las heridas sufridas por sus dos hijos, Daniel y Darío.
Luego de las últimas palabras de los imputados y de un cuarto intermedio para deliberar, los magistrados resolvieron imponer una pena de 15 años de prisión para José del Valle Iturre, conocido como “Arnold”; 14 años para José Enrique Iturre, alias “Perra” (padre del resto de los condenados); 10 años para Leandro Maximiliano Iturre, apodado “Puchuno”; y 7 años para Enrique Oseas Iturre.
Los violentos incidentes ocurrieron el 18 de abril de 2020 en el cuarto pasaje del barrio Huaico Hondo de la ciudad Capital.
De acuerdo con lo expuesto durante el juicio, aquella madrugada del 18 de abril de 2020, la familia Gómez se encontraba descansando en su domicilio. Darío sostuvo que sorprendió a Oseas Iturre tratando de ingresar a su casa y le arrojó una botella de vidrio. Seguidamente, debido a las amenazas y hostigamiento, se enfrentó en la vereda de su casa con “Debi” (otro de los hermanos de los condenados y pareja de la hermana de Darío), mientras que su hermano Daniel (h) se trenzó en lucha con Oseas. Este último acuchilló a Daniel, quien quedó tirado, ocasión en la que el padre del herido salió a la vereda ante el escándalo. Mientras “Debi” había sido inmovilizado por Darío, Oseas se marchó y decía que iba a regresar con sus hermanos y su padre.
Momentos después llegaron varios miembros de la familia Iturre armados con machetes, cuchillo, fierro y palo. “Venían decididos a matar”, afirmó Darío.
Machetearon a Daniel Gómez (padre) e hirieron a sus hijos, a tal punto de dejarlos porque pensaban que los tres estaban muertos.
Los tres integrantes de la familia Gómez fueron trasladados al hospital Regional, donde Daniel Gómez (padre) murió el 2 de mayo de ese año, mientras que sus hijos sobrevivieron con secuelas físicas. En este sentido, Darío sufrió desprendimiento de retina de un ojo y su hermano Daniel tuvo que ser intervenido quirúrgicamente por un coágulo de sangre en la cabeza.
En los alegatos, los defensores de los imputados habían solicitado la absolución de sus clientes por considerar que habían obrado en su legítima defensa y de un tercero.
El tribunal ordenó desalojar a los familiares de los cuatro imputados por incidentes
Los familiares de los cuatro imputados (varones y mujeres) estuvieron presentes ayer en la audiencia. Sin embargo, mientras se leía el veredicto del tribunal, los familiares protagonizaron incidentes en el que clamaron a los gritos la inocencia de los acusados, a tal punto de escucharse un insulto y uno tuvo que ser sostenido por un allegado para no movilizarse de su lugar.
El incidente obligó al juez Pérez Gallardo a ordenar que se desalojara a los familiares de los Iturre de la sala y del edificio de Tribunales.
Antes del fallo condenatorio, los imputados pudieron decir sus últimas palabras ante los magistrados. José “Perra” Iturre manifestó que es “totalmente inocente” y que “Dios iba a poner las cosas en su lugar”. José “Arnold” Iturre sostuvo que “ha sido algo muy doloroso y triste”, pidió “perdón” a su familia, a las personas que han resultado dañadas y que sean justos con él. Leandro “Puchuno” Iturre “lamentó lo ocurrido” por el dolor tanto de su familia como la de las víctimas. Oseas Iturre no quiso decir nada.
